La victoria del campeón del Masters parecía casi imposible cuando Russell Henley realizó un impresionante acercamiento al noveno hoyo, de par 5, para conseguir un eagle que le proporcionó una ventaja de cinco golpes en la vuelta.
Tras salir con seis bajo, Henley parecía dispuesto a vengarse de los tres colapsos de los últimos 15 meses, en los que había tirado por la borda lideratos a 54 hoyos. No sería así, Miraba casi incrédulo al marcador después de que los últimos nueve hoyos, con 1 sobre el total, permitieran a Matsuyama competir por el torneo.
El mejor golfista japonés necesitó cuatro birdies en los últimos nueve hoyos, y ver como Henley no conseguía embocar un putt de 3 metros de para ganar el torneo en regulación.
Un fantástico segundo golpe de 276 yardas con madera 3 al green del 18 durante el primer hoyo de desempate se detuvo a pocos metros del hoyo. Henley no pudo presionar después de enviar su golpe de salida a un búnker, colocarse en la calle y fallar el green con su tercero.
El campeón del Sony Open 2013 parecía en estado de shock mientras luchaba por un bogey antes de ver a Matsuyama embocar un eagle para triunfar por octava vez en el PGA Tour.
«Me siento muy bien. Ganar aquí, donde el primer jugador japonés Isao Aoki ganó en el PGA Tour, es muy especial», dijo Matsuyama después de unirse a K.J. Choi con la mayor cantidad de victorias de un jugador asiático en la historia del Tour
«Especialmente en un campo que no he jugado tan bien. Es un campo de golf difícil para mí. Estoy muy emocionado, muy feliz por eso».
A pesar de jugar en Estados Unidos contra un estadounidense, Matsuyama era el claro favorito del público gracias a la fuerte población asiática de Honolulu. Sony también es una empresa japonesa de gran éxito, y la oleada de apoyo le levantó en los últimos nueve hoyos. En cuanto al golpe que ayudó a Matsuyama a colocarse en cabeza de la FedExCup como primer bicampeón de la temporada comento, «Era el número perfecto para mí para una madera 3 cortada, 276 yardas de izquierda a derecha, seguir el viento», sonrió. «Sabía que el green estaba lo suficientemente blando como para aguantarlo, y fui capaz de conseguirlo. Para ser sincero, ni siquiera lo vi, pero todo el mundo empezó a animar y supe que era bueno».
Henley trató de mantener una cara valiente después, a pesar de otra derrota aplastante. La última de sus tres victorias llegó en el Valero Texas Open de 2017, y ahora está 1 de 6 cuando tiene el liderato en 54 hoyos.
«Me di un putt en el 18 para ganar el torneo … Todavía me estoy rascando la cabeza sobre cómo lo fallé. Estuvo muy cerca de entrar. Estuve cerca de conseguir una victoria», dijo Henley.
«Me duele. He jugado un gran golf. Siento que esta vez he estado mentalmente fuerte en todo momento. No he tenido demasiados fallos mentales como en otros torneos en los que he estado cerca del liderato en los últimos dos años.
«Es difícil de digerir, pero Hideki ha jugado muy bien todo el día y me alegro por él. Mirando hacia atrás al comienzo de cada semana, si puedes decir que lo hiciste a pesar de lo que pasó, es una muy buena semana en el PGA Tour. Tomaré mucha confianza de eso».
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Fotos: PGA Tour
