En un comienzo de año escandalosamente bajo en el PGA Tour, Rahm y Smith se alejaron del resto de los ganadores al ir golpe por golpe, putt por putt a lo largo de los últimos nueve hoyos en el indefenso recorrido de Plantation Course.
Rahm coronó su final con una impresionante secuencia de birdie-eagle-birdie-birdie con putts desde nueve metros y cuatro metros y medio para un doce bajo, 61 golpes. Eso empató el récord del campo establecido unas horas antes por Justin Thomas, que estaba un golpe por detrás cuando terminó su vuelta que se convirtieron en nueve golpes cuando terminó el día.
La puntuación media de 67,7 fue la más baja en Kapalua desde que el Torneo de Campeones se trasladó al extremo oeste de Maui en 1999. El récord anterior era de 67,8, establecido el día anterior.
No hay nada que detenga a estos chicos excepto ellos mismos, y eso no estaba ocurriendo.
Rahm y Smith están en 26 bajo, cinco golpes por delante de Daniel Berger, que tuvo una tercera ronda consecutiva de 66. Eso no fue suficiente para esta semana perfecta de clima cálido, muy poco viento y una puntuación extraordinariamente baja.
Ernie Els estableció el récord del PGA Tour de puntuación más baja con 31 bajo par en 2003 en Kapalua. Ese record está en peligro.
«Un golf realmente bueno por parte de ambos», dijo Smith.
Tenía una ventaja de tres golpes al comienzo de la tercera ronda, seguía con tres golpes de ventaja tras seis hoyos y luego firmó 8 bajo par en sus últimos 12 hoyos, y perdió el liderazgo absoluto.
Rahm, el número 1 del mundo, que parece que va a mantener, estuvo en su mejor momento en su primera competición desde mediados de octubre.
Cerró los primeros nueve hoyos con tres birdies consecutivos y comenzó los últimos nueve con dos birdies seguidos. Los únicos hoyos en los que tuvo que conformarse con el par fueron el doce (donde falló un putt para birdie desde tres metros y medio) y el trece (se quedó corto con un putt de tres metros).
Su mejor golpe fue un segundo tiro en el par 5 del hoyo 15 para dejar la bola a poco más de un metro y conseguir un eagle. Eso le puso a un golpe después de que Smith tuviera que conformarse con un birdie de dos putts. El resto de la competición se saldó con sendos birdies, ambos desde los 10 metros del hoyo 17, hasta el último par 5. Ambos se quedaron cortos, algo que no es habitual en la mayoría de los casos.
¿Y los otros 36 ganadores? No todos están fuera de juego.
Patrick Cantlay intentaba mantenerse con los líderes hasta que su wedge en el 16 salió fuerte y encontró el rough detrás del green, llevando a un bogey. Terminó con un 66 y quedó a seis golpes, junto con Matt Jones (62) y Sungjae Im (65).
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Fotos: PGA Tour
