Como si no hubiese tenido descanso, como si jugara solo por inercia, dejándose llevar. Un golf muy fluido y muy buenas sensaciones son las que ha acumulado el español Jon Rahm en su »vuelta a los ruedos». Tras un pequeño descanso de tres semanas para cargar pilas y pulir algunas cosas, Rahm se ha marcado un 67 que le ha situado en el cuarto puesto empatado.
Muy cerca, a solo dos impactos, está el líder Tyrrell Hatton, único que lograba poner el listón en 65 golpes (eagle, siete birdies y dos bogeys); otro que viene con inercia tras imponerse en el BMW PGA Championship de hace muy pocos días.
El caso es que el vasco, lejos de pecar de óxido en sus palos, lo hacía de fluidez, de un swing muy efectivo que le permitía perder muy pocas calles (algo complicado en el recorrido de Shadow Creek, que no es precisamente muy favorable en estos menesteres) y cometer un único error (hoyo 8) en los primeros 9, donde ya acumulaba tres birdies, cifra que después aumentaría con tres más y otro bogey en el 16.
Tras el británico se colocaban, a un golpe, Russell Henley y Xander Schauffele, seguidos a otro impacto más de nuestro Jon Rahm y Tyler Duncan. Más abajo concluían dos buenos Ian Poulter y Abraham Ancer (T9 con 69 golpes), Jason Day y Hideki Matsuyama (T14 y 70 golpes), Collin Morikawa (T22), Justin Thomas (T32), Rory McIlroy (T37) o Jordan Speth y Justin Rose (T46), todos ya bastante descolgados.
Quien no ha empezado con excesiva suerte y buen resultado ha sido Sergio García, quien a pesar de quedar por debajo del par del campo (-1) obtenía 71 impactos que es una renta demasiado elevada para lo visto este jueves. Dos birdies y un bogey, muy poco bagaje en la cartera para el de Borriol, quien ha tenido cierto lastre en los segundos tiros, que no le han permitido dejarse más opciones de birdie.
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Fotos: PGA Tour