El RBC Heritage se ha convertido en un “pim, pam, pum”, decenas de jugadores están llenando sus tarjetas con eagles y biridies copando los puestos más altos de la clasificación. Con poco o ningún viento entrando desde el mar y los pequeños greens suaves porque requieren riego constante debido al calor, los jugadores están devorando este campo arbolado y estrafalario lleno de doglegs que normalmente tiene a los jugadores al límite.
No importan las semanas que han estado parados debido a la pandemia, no parece que haya oxido en su juego. Si la semana pasada hubo una lucha sin igual por el torneo está semana no le va a la zaga.
«Creo que la gente está hambrienta», dijo Carlos Ortiz, que firmó 63 golpes y está empatado en el quinto lugar. «Quieren ganar dinero, así que todos intentan jugar bien. Creo que las condiciones son ideales, casi no hay viento. Los greens son blandos, así que están lanzando dardos ahí fuera».
«Una vez que te pones en posición desde el tee, sientes que tienes hierros cortos, y con greens suaves, tienes una buena oportunidad de dejarla bastante cerca.»
En un sábado soleado, seis jugadores firmaron un 63, a un paso del récord del PGA Tour de más rondas de 63 o menos establecido en la segunda ronda del RSM Classic en 2019. Uno de esos 63 fue marcado por Tyrrell Hatton, que se movió a 15 bajo par depués de 54 hoyos y está empatado en el liderato junto a Abraham Ancer (65), Ryan Palmer (66) y Webb Simpson (68).
Hatton ganó el Arnold Palmer Invitational antes de que la pandemia de COVID-19 detuviera el juego en el PGA Tour durante 91 días.
«No sería sorprendente que mañana alguien que esté cerca del vigésimo puesto salga y dispare potencialmente un resultado muy bajo para ganar el torneo», dijo Hatton. «Si el clima es el mismo, creo que probablemente será otro día de baja puntuación».
«Todos hemos tenido suficiente aviso para tratar de prepararnos para jugar torneos de nuevo. Así que no es muy sorprendente ver a los chicos jugando tan bien como ellos.»
Un golpe detrás del cuarteto que marca el ritmo están Ortiz, Berger (63) y Joel Dahmen (63). En 13 bajo par, dos por detrás, un grupo grande que incluía a Joaquin Niemann (63), Sergio García (65), Chris Stroud (63), Michael Thompson (66), Ian Poulter (67), Matthew Fitzpatrick (68), Corey Conners (69) y Erik van Rooyen (66). En doce bajo par otros cinco jugadores, incluyendo a Brooks Koepka (68), Dustin Johnson (67) y Bryson DeChambeau (70).
Son 21 jugadores a tres golpes. La batalla final está servida.