Esta decisión pone fin a meses de especulación, reuniones y rumores; eso sí, no será un proceso sencillo y se estima que hasta el 2022 no se logrará la mudanza al completo.
Seth Waugh, el CEO del PGA de América, fue quien dio los primeros pasos en pos de la búsqueda de una nueva sede: »Redujimos el proceso a cinco o seis sitios y fue Frisco (al sur de Texas), el que mostró mejor predisposición. Queremos que sea no solo nuestra sede, sino también un laboratorio donde trabajar por el golf’».
»El nuevo emplazamiento contará con dos recorridos de competición, así como un recorrido corto y esperamos que se unan más referentes en el negocio para convertirlo en una especie de Silicon Valley del golf».
Así, la PGA se trasladará de Palm Beach Gardens, en Florida (donde lleva desde 1965), a su nueva casa, y empleará a un total de unas 100 personas en su nueva ubicación. Además, el PGA Championship se llevará a cabo en uno de los dos nuevos recorridos en 2027 y 2034, al tiempo que el Senior PGA Championship y el Women PGA Championship se celebrarán allí dos veces, además de una posible Ryder Cup. El US Open de 1969 en Houston fue el último de los principales en jugarse en Texas.
Fuente: Golfweek