Prometía emociones fuertes el sábado en Illinois y Jon Rahm se encargó de concentrarlas todas en su persona. Palo al hombro, seriedad y mirada certera para llegar a la Casa Club con 65 golpes (siete birdies y un solitario bogey en el 9) que le dieron, no solo una de las mejores vueltas del día, sino también el derecho a pelear por la victoria, una vez más.
Y es que el de Barrika perseguía el quinto puesto, ese que le daría la oportunidad de depender de sí mismo en el último torneo de esta FedEx Cup y, de momento, el objetivo está cumplido. Veremos el domingo, porque promete de nuevo haber recital y seguro que Rahm lo pelea desde el primer tee.
Quien sigue con un dominio insultante es Marc Leishman. El norteamericano no se baja del burro, mejor dicho del liderato, y por tercer día consecutivo marca la pauta, a pesar de ser su peor registro hasta la fecha, 68 golpes con una primera parte de recorrido algo atragantada con dos bogeys, si bien ha conseguido aumentar las diferencias hasta los cinco golpes y, en principio, depende de sí mismo y de su acierto para imponerse en la cita, seguido por Rickie Fowler y Jason Day (-14), quienes se calcaron el día (ambos 70 golpes.
Sube enteros también Justin Rose, colocado en el segundo pelotón de perseguidores, cuarto, tras ofrecer unos muy buenos 66 golpes, y detrás ya viene Rahm, empatado con otros seis jugadores.
En cuanto a los otros dos españoles, Sergio García recuperaba algo de terreno tras terminar, por tercer día seguido, con 68 golpes (cuatro birdies y un bogey). De mantenerse así estará en la última cita, pues de momento se ha metido entre los 30 de la clasificación, aunque tocará no descuidarse. Más complicado, por no decir casi imposible lo tendrá Rafa Cabrera Bello quien, con 70 golpes, caía posiciones, hasta el T27, y ahora necesita una auténtica revolución para meterse entre los mejores del ranking. Parece imposible pero peores cosas se han visto en el golf. Toca seguir remando y peleando.
Desahuciados de cara a la victoria están Jordan Spieth (71 y T27), Henrik Stenson (69 y T34), Ian Poulter (70) y Justin Thomas (71), empatados en el T41 y Hideki Matsuyama (70 golpes y T49).
En el grupo de los casi imposibles de pasar al cuarto playoff está Rory McIlroy, muy lejos de todos y de sí mismo, o al menos de su nivel habitual de ex número 1. El norirlandés marcha con -2 y una última vuelta de 70 golpes y, salvo milagro mayúsculo, causará baja en la última cita.
Aunque clasificado, quien también está lejos es Dustin Johnson, fuera de sí en este torneo, puede que reservándose para lo que se viene; en esa ocasión entregaba 69 golpes para subir seis puestos, hasta el T55.
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Fotos: PGA Tour
