Rickie Fowler ha destapado el tarro de las esencias, ese que siempre le lleva a pelear con los mejores y ganar en múltiples ocasiones, si bien aun necesita consistencia para estar en el top 3, de calidad no anda falto.
Parece que en este The Honda Classic se ha tomado como objetivo volver a ganar y lo está haciendo ofreciendo un gran rendimiento y un golf al que nadie aparte de él está llegando. Tercera vuelta y bajada de registros, con 65 impactos (cinco birdies) para tener cuatro de ventaja (-13) sobre el segundo.
Sin embargo, nada está decidido en el PGA National, un campo que tan pronto da como quita, y eso mismo es lo que sufrieron los dos líderes, Wesley Bryan y Ryan Palmer (72 y 73 impactos), quienes se vieron relegados a posiciones mucho más abajo. Por lo tanto, todo depende del campo… y de Fowler, que será también quien decida si permite algún otro contendiente en el idilio que mantiene en Palm Beach Gardens desde el jueves.
En cuanto a los españoles, apuntan maneras. Sergio García ha marcado 66 golpes (eagle, cinco birdies y tres bogeys) para recuperar el terreno perdido el día anterior y escalar 28 posiciones hasta el puesto 20, ya con el top diez más cerca, a un solo golpe, donde hay un nutrido grupo de 12 jugadores.
Rafa Cabrera Bello también brilló en el PGA National, con 67 impactos (seis birdies y tres bogeys) y también está en el puesto 20 empatado con el de Borriol y con otros seis rivales más.
Ahora es el momento de que los españoles metan presión, pues jugarán bastante antes del comienzo del partido estelar que decidirá (o no) el título. Pero ya saben, todo depende del campo y de Fowler, más en concreto de que su cabeza no le juegue una mala pasada.
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Fotos: PGA Tour
