El PGA Tour Champions vibró con el emocionante duelo que mantuvieron en los hoyos de Florida para decidir al ganador del Chubb Classic.
Ambos se fueron marcando durante las tres jornadas de competición, con vueltas de 68, 65 y 67 para el norteamericano y 65, 67 y 71 para el español.
Empezó mejor Couples, quien acumuló cinco birdies en su recorrido, mientras que el malagueño se atascó con un bogey nada más comenzar y desde ese momento fue a remolque y aunque tuvo momentos de gran excelencia tanto desde el tee de salida como en varias recuperaciones de maestro, no pudo con el golf que estaba desarrollando su rival.
Los dos ofrecieron un recital excelso que demostró que, a pesar de ser veteranos, tienen el espíritu de dos jóvenes que recién empiecen en este deporte.
Jiménez lo intentó de todas las maneras posibles, buscando los birdies que metieran aun más presión al ex ganador de major pero este no se puso para nada nervioso y siguió a lo suyo con grandes tiros para solventar cualquier conato de rebeldía del andaluz.
Ellos disfrutaron y el golf también y esa es la mejor señal, aparte de ver a Jiménez peleando de nuevo por títulos. Seguro que no es el último y esta temporada le veremos levantar más de un trofeo.
Junto a Jiménez, también disfrutó, especialmente el último día, José María Olazábal, quien ofrecía 68 golpes para cerrar su participación y seguir cogiendo la forma necesaria para una temporada en la que espera llegar hasta finales de año a buen nivel.
