Una gran vuelta, 65 golpes, con cuatro birdies, un eagle y un bogey (-5), le han valido a Sergio García, el jugador de Borriol, para encaramarse a lo más alto del The Honda Classic, torneo del PGA que se disputa estos días en el recorrido de Palm Beach, en la soleada Florida.
Sin embargo, ha sido precisamente la luz, o la falta de ella, lo que ha provocado que la competición se suspenda temporalmente hasta que mejore la visibilidad.
En ese momento, lideraba el representante español, aunque igualado con el norteamericano Michael Thompson, mientras que a un golpe están otros dos estadounidenses, William McGirt y Rickie Fowler, el número cinco del mundo y rival siempre peligroso, quien ha empezado mordiendo con cuatro birdies sin fallo.
Ahora, espera continuar con su buen juego con el fin de volver a levantar un título en estas lides, algo que no consigue desde el pasado 2012, cuando ganó en el Wyndham Championship, si bien hace dos años logró una victoria en el European Tour (Masters de Qatar).
Por su parte, Phil Mickelson ha comenzado con 69 impactos (cuatro birdies y tres bogeys), algo irregular, si bien mucho peor la ha ido a Rory McIlroy, quien ha comenzado desacertado, con una ronda de 72 golpes (cinco birdies, otros cinco bogeys y un doble bogey), por lo que deberá mejorar sensiblemente si no quiere incluso quedarse fuera del corte.
