Comenzó la jornada final con una ventaja de tres golpes que pronto aumentó al cerrar sus nueve primeros hoyos con treinta golpes. Cinco birdies, sin fallo, en su tarjeta. De ahí en adelante el camino fue sencillo hasta llegar a la casa club con una ventaja de seis golpes sobre Kevin Chappell.
Kisner se convierte en el sexto jugador que consigue su primera victoria en el PGA Tour en esta parte inicial de la temporada en el circuito. Aunque para los analistas no ha sido una sorpresa.
Kisner, natural de Carolina del Sur y de 31 años de edad, ha jugado en el 2015 su mejor temporada como profesional alcanzando el puesto vigésimo quinto en el ranking mundial. Perdió en el desempate en Hilton Head, Sawgrass y Greenbrier siendo segundo en el último World Golf Champioship, hace dos semanas, en Shanghai. Solamente le faltó la victoria que, llegó ayer, en el RSM Classic.
Kisner emboco un putt de dos metros en el segundo hoyo y nadie se acerco a menos de cuatro golpes hasta que llegó al 18 donde con un par cerró el torneo con veintidós bajo par lo que supone un nuevo record. Aunque lo mejor, con diferencia, fue ve a su hija Kate de un año corriendo hacia él en el green.
Kisner la levantó y le dijo “Lo hicimos”. Esta vez si.