Watson envió su golpe de salida en el hoyo 13, par cinco, a un arbusto del desierto cerca de una madriguera que interfería en su swing, situación que le permitió beneficiarse el un dopaje sin penalidad.
“Cerca de mi bola había una madriguera que interfería en mi golpe”, dijo Watson. “ Era un agujero grande, y el hierro golpearía en el mismo. Así que tenia alivio.”
Desde ese punto golpeo un tiro de 135 metros a la calle, al collar de green con un wedge y dos puts para salvar el hoyo. Firmó 68 golpes que le permiten mantener el liderato por dos golpes.
Sin el alivio hubiera tenido que jugar un golpe corto. “Hubiera buscado un golpe de 25 a 30 metros” confesó Watson.
El campeón defensor, Phil Mickelson, hizó un doble bogey en el hoyo 16, par 3. Su golpe de salida se fue a la izquierda del hoyo. Desde allí falló su especialidad y mandó la bola al bunker, para finalizar con dos putts.
“Era un gap wedge fue patético”, dijo Mickelson. “Yo ni siquiera se que decir. No recuerdo haber hecho nunca un golpe así, ni siquiera en prácticas”.
Termino con 72 golpes. Tres bajo par al total, sin opciones en la jornada del domingo.