Con un viento suave y una niebla marina sobre la península de Monterey que mantuvo las temperaturas entorno a los 10 grados, ésta fue la versión suave de Pebble Beach. Aunque no deja de ser un Abierto de los Estados Unidos y, no hizo falta mucho para pasar factura, especialmente a los primeros.
Las cuatra primeras jugadoras de la clasificación mundial combinaron 22 golpes sobre par. Jin Young Ko, la jugadora número 1 del golf femenino, y Lilia Vu, que ganó el primer Major de la LPGA del año, hicieron 79 golpes cada una.
Rose Zhang, la sensación de Stanford de 20 años que ganó en su debut profesional el mes pasado, desperdició un buen comienzo con un doble bogey en el octavo hoyo que frenó su ímpetu. No hizo un birdie el resto del camino, y tuvo que chipear en sus últimos cuatro hoyos – uno de ellos desde el lado equivocado del green en el par-3 del 17 al igual que Gary Woodland hizo en 2019 cuando ganó el Abierto de Estados Unidos.
Xiyu Janet Lin comenzó su ronda en el difícil hoyo 10 de par 4, y salvó el par en cuatro de sus cinco primeros hoyos antes de embocar un putt de birdie de dos metros ymedio en el 15. El único bogey de la jugadora china se produjo al final, cuando falló un putt desde cerca de un búnker en el hoyo 9.
«Al principio, el putt me salvó», dijo Lin, que sólo embocó 25 putts y lideraba la estadística clave del putt. «Hacer esos putts cortos realmente aumentó mi confianza, haciéndome sentir más cómoda para atacar cuando lo necesitaba».
Hyo Joo Kim, cuyo único major fue el Campeonato de Evian en 2014, estaba 4 bajo en ocho hoyos hasta su único bogey en el noveno. Sólo hizo un birdie el resto del día, un putt de 6 metros en el 17 que le permitió alcanzar a Lin.
Estaba contenta con su resultado y con el lugar.
«Creo que puedo presumir de esto, de mi oportunidad de jugar en Pebble Beach», dijo Kim.
La amateur irlandesa Aine Donegan no recogió sus palos hasta el martes, cuando descubrió que su driver estaba dañado, y firmó un 69 que incluyó un wedge que embocó desde 96 yardas en el quince. Estaba en un grupo numeroso con un golpe de desventaja que incluía a la jugadora irlandesa más destacada, Leona Maguire, que hizo birdie en el hoyo 18.
Maguire viene de una dura derrota hace dos semanas en el PGA Women´s Championship en Baltusrol, cuando perdió el liderato en los 54 hoyos con un 74.
«Creo que cuando tienes otro Major a la vuelta de la esquina y en un lugar como Pebble, tu enfoque cambia rápidamente», dijo Maguire. «Espero tener otra oportunidad esta semana».
Este ha sido uno de los eventos más esperados del año para el golf femenino por su ubicación. Pebble Beach es la más emblemática de las sedes del US Open, y la más reconocible por sus vistas al mar en la mitad de los hoyos.
Xiyu Janet Lin dice que el mejor consejo se lo dio la persona que le arregló los palos.
«Me dijo: ‘En cualquier hoyo en el que estés, tómate 30 segundos para contemplar las vistas y te sentirás muy agradecida de estar donde estás’. Creo que tiene toda la razón», afirmó. «Formamos parte de la historia. Es genial. Así que creo que me dije a mí misma que ésta iba a ser una semana memorable».
Flojo inicio de las españolas. Carlota Ciganda firmó un 74 para terminar en el puesto treinta y nueve. Un golpes más registró la malagueña Azahara Muñoz cayendo al puesto sesenta y seis por debajo de la línea de corte, los mismo golpes y posición que Teresa Toscano la tercera participación española en este grande.
