La neozelandesa Lydia Ko se lleva para casa el LPGA Mediheal Championship. Llevaba tiempo sin sonreir en el típico selfie de la vencedora en el LPGA pero este fin de semana le ha tocado. Arrancaba como líder y aunque sufrió, conseguía aguantar las embestidas de las rivales.
San Francisco ya le vio triunfar en 2014 y 2015 y ahora en 2018. Tras salir en el partido estelar del domingo, antes de la mitad de recorrido ya había dilapidado todo el margen que llevaba, ya que se había anotado tres bogeys (1, 4 y 6) y Minjee Lee birdie y bogey y le había empatado.
Al paso por el 9, había cedido el liderato y todo parecía indicar que Lee lo tenía todo controlado, pero en los segundos nueve, algo cambió. Ko se anotaba cuatro birdies y un bogey para un registro final de 71, mientras que Lee cinco birdies y dos bogeys y aunque apretó con dos en los hoyos 17 y 18, el birdie del 18 de Ko fue esencial para que la asiática pudiera forzar el desempate.
Demostró, a pesar de su extraordinaria juventud, templanza y calidad, esa que parecía haberse esfumado no hace mucho, desde que perdiera el número 1 y en la muerte súbita, volvió a sacar su carácter. Un gran golpe desde la calle llegó al hoyo y quedó muy cerca, lo suficiente para, al siguiente, lograr un extraordinario eagle y sentenciar el torneo.
La pelea por el número entre Inbee Park y Shanshan Feng estuvo a punto de cambiar de manos. Park es la líder del ranking y en esta cita quedó algo retrasada, en el puesto 32 empatada, mientras que la china en el T3, a cuatro golpes del liderato y a uno solo de arrebatárselo.
En el séptimo puesto terminaban Aditi Ashok y Ariya Jutanugarn (-7), mientras que Moriya finalizaba decimoprimera y So Yeon Ryu en el puesto 18 empatada.
En cuanto a las españolas, Carlota Ciganda fue la mejor colocada, en el puesto 11, con 70 impactos (-5), mientras que algo más abajo estuvo Azahara Muñoz con 68 golpes (T28).
Por último, María Hernández se despedía con 74 golpes y un puesto 58 (+6) y desgraciadamente no ha podido terminar una sola ronda por debajo del par, aunque sí pasar el corte, algo que siempre es positivo.
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Fotos: LPGA Tour
