Con 23 años y en muchas ocasiones a la sombra de su hermana, Moriya Jutanugarn ha demostrado que el golf y la calidad no es solo cosa de Ariya, si no que va intrínseco en el apellido.
Le ha costado más de 100 torneos, muchos golpes y alguna que otra lágrima por aquello de quedarse a las puertas pero en esta ocasión, y en un torneo que se estrenaba en el calendario, también se ha estrenado ella.
Abrazo de las hermanas que supone un reconocimiento de la exitosa Ariya al trabajo que sabe realiza su hermana cada semana y que ahora, con este premio, le otorgan la condición de hermanas ganadoras en el LPGA, las segundas tras el apellido Sorenstam.
Moriya ha terminado con 68 golpes (cuatro birdies y un bogey) y -12 en su acumulado, a dos de la citada Jin Young Ko, con quien compartía liderato al inicio del día y de Inbee Park, quien esta vez sí ha podido hacerse con el número uno del mundo, desbancando a la china Shanshan Feng y recuperando un cetro que no ostentaba desde 2015.
En cuanto a las españolas, la mejor ha sido Carlota Ciganda y su magnífico final de 68 golpes (tres birdies) para meterse entre las 12 mejores empatada, entre otras, con Lexi Thompson y la citada Feng.
Azahara Muñoz se fue algo más larga, a los 73 impactos, para caer hasta el +1 y el puesto 28, mientras que Beatriz Recari necesitó un golpe más, 74, para terminar dentro de las 42 mejores con un acumulado de +5.
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Fotos: LPGA Tour
