El Swinging Skirts LPGA Taiwan Championship tuvo un gran final con un mano a mano entre dos jugadoras. Por un lado Lydia Ko, quien ha hecho un torneo de más a menos y ha vuelto a demostrar por qué no hace mucho era la número uno, toda vez que concluyó con una carrera meteórica con 65 golpes (siete birdies), y por el otro la flamante campeona, Ji Eun-Hee, quien correspondía a la actuación de la neozelandesa con idénticos registros.
La surcoreana terminaba con un acumulado de -17 y seis de diferencia, excelentes sensaciones y aun mejor golf. Partía con ventaja, la supo administrar y moldear a su antojo, sin ponerse nerviosa ante el empuje de Ko y, algo más lejos, de So Yeon Ryu, quien también entregaba 65 golpes pero estaba aun más lejos, a diez impactos.
El torneo concluyó con grandes sensaciones por parte de Carlota Ciganda, a la postre tercera con 68 golpes, su mejor tarjeta durante los cuatro días de juego y empatada con la citada Ryu, Lizette Salas, Madelene Sagstrom y Shanshan Feng, palabras mayores.
Fue su mejor vuelta y aunque no le permitió terminar de remar hacia la pelea por el título, sí le dio la opción de mantener una posición que ha costado conseguir tras un comienzo no excesivamente bueno de 72 golpes el primer día.
La mala noticia fue el resultado de Azahara Muñoz, muy abajo durante todo el torneo y, para concluir, un mal 78 (cuatro bogeys y un doble bogey) que le ha relegado hasta el puesto 53 (+7).
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Fotos: Ji Eun-Hee (LPGA Tour)
