Enorme triunfo, con más altibajos quizá de los previstos, para Sergio García. Buena vuelta la suya en The International, con 69 impactos creados a base de siete birdies y cuatro bogeys y, sobre todo, mucha sangre fría.
Empiece vertiginoso, con birdie en el 1, bogey en el 2 y después, tres birdies seguidos, pudiendo incluso haber conseguido un eagle en el 3 que se le fue por poco, y consiguiendo un magistral putt de cerca de nueve metros, demostrando calidad, concentración, mentalidad ganadora. Era su momento.
En el 6 y 7 se frenó ligeramente con dos bogeys que llegaron tras no estar demasiado certero en los greenes, un frenazo en seco que no le impidió mantener el liderato pero que sí mermó al máximo su ventaja. Lejos de venirse abajo y caer en su rendimiento, siguió aguantando y buscando los birdies, manteniendo la línea y asegurándose el no meterse en excesivos problemas.
Era momento de tirar por la línea, no hacer estridencias y mirar hacia los que estaban debajo suyo por si a alguno le daba por sublevarse. Nadie terminó de inquietarle y Sergio respondió con birdies en el 11, 15 y 16 (además de bogey en el 17), el cerrojazo definitivo. El torneo era suyo.
Sergio se ha convertido así en el séptimo español que levanta el título en tierras holandesas, uniéndose a un club en el que están Seve Ballesteros, Gonzalo Fernández Castaño, Ramón Sota, Miguel Ángel Jiménez, José María Olazábal y Ángel Miguel, el primero, en 1965.
Tras Sergio terminaban Nicolai Hojgaard, a un único golpe, un trío de ingleses con Matt Wallace (-15), James Morrison (-14) y Callum Shinkwin (-13); Thomas Pieters (71 y -10), George Coetzee, Patrick Reed y Padraig Harrington (-9) y Eduardo de la Riva con un mal día de 76 golpes en el puesto 40 (-5).
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Fotos: European Tour
