No era fácil la partida de Tommy Fleetwood, ya que compartía vuelta nada más y nada menos que con Dustin Johnson y con Rory McIlroy. Palabras mayores para cualquiera, pero no para él teniendo en cuenta que viene muy enchufado, tras llevarse el Premio Seve Ballesteros al Mejor Jugador del Año.
Y lo demostró sobre el campo. Salía del tee del 1 muy concentrado y llegaba al green del 18 con 66 goles (seis birdies sin un solo error), solo igualado por el japonés Hideto Tanihara con idénticos registros de birdies.
Como decimos, no se amilanó ante la presencia de Johnson y de McIlroy, y a los dos los ganó por la mano, al norteamericano tras irse este a los 72 impactos y al norirlandés con algo menos de margen (69).
Otros que también brillaron fueron Bernd Wiesberger (67), Matthew Fitzpatrick (68), Matin Kaymer y Alexander Levy (69), Paul Casey y Henrik Stenson (70), Justin Rose (71) o Branden Grace (72).
En cuanto a la Armada Española, decir que el mejor fue Carlos Pigem con un muy buen 68 (T8), a solo dos del liderato, mientras que la resto hay que irlos a buscar algo más abajo, concretamente a Jorge Campillo, que aunque tiene un golpe más, está en un grupo muy numeroso en el T17. Con 70 impactos están Adrián Otaegui y Álvaro Quirós y con 71, en el T55, Alejandro Cañizares y Pablo Larrazábal (71).
Rafa Cabrera Bello entregaba el PAR del campo, Nacho Elvira se iba a los 72 golpes y, casi en la última posición, José María Olazábal con 78 y casi sin opciones de pasar el corte.
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Fotos: European Tour
