El sevillano Pedro Oriol apretaba el puño tras meter la bola en el último hoyo de este Rolex Trophy, sabedor de que la victoria era suya, y con mucho merecimiento, pues remó a contracorriente toda la jornada y, gracias a una gran vuelta de 65 golpes (dos eagles, cuatro birdies y un bogey), forzaba el desempate con el francés Adrien Saddier y se imponía en la primera opción que tenía.
No partía con demasiadas opciones claras de triunfo, pero el espíritu de Seve Ballesteros, en cuya casa estuvo la semana previa al torneo visitando a Javier, su hijo, fue un punto muy a su favor, pues seguro que Seve empujó y mucho.
El Club de Golf de Ginebra veía como, hoyo a hoyo, el español le recortaba distancias al francés, quien llegó a estar con -18, pero se vio frenado en seco por un bogey en el hoyo 18, lo que le dio aun más alas a Oriol, quien venía embalado y sin frenos en pos de, cuanto menos, igualar la contienda. Y así lo hizo, pues empató con el galo y le llevó de nuevo al 16, donde ambos habían cosechado el par en la ronda, pero esta ve el madrileño fue mejor.
Una gran salida le colocó con mejores opciones, ya que el francés mandó la bola al agua (más alas para Oriol) y ya fue a remolque lo que quedó de desempate y mientras que el español lograba el par, el francés se anotaba el bogey, insuficiente para levantar el trofeo.
Así, tras Carl Suneson en 195 y 1999 y Nacho Elvira el pasado 20165, el Rolex Trophy se pinta de nuevo con los colores rojo y amarillo de nuestra bandera y Oriol conseguía asentarse entre los mejores en la Road to Omán y en la clasificación del Challenge Tour de cara a conseguir la tarjeta del European Tour el año próximo, ya que ahora solo le superan Aaron Rai y Julian Suri.
La cruz del día fue para Borja Virto, quien partía como líder pero se desinfló con 79 golpes, un registro muy malo que no le permitía en ningún momento pelear por la victoria, ya que se anotaba dos dobles bogeys, cinco bogeys y dos birdies. Mucho mejor le fue a Scott Fernández, quien se aupó a la tercera plaza con una de las mejores tarjetas del día (65 golpes) gracias a sus siete birdies sin fallo.
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Fotos: European Challenge Tour
