Un final muy ajustado, decidido por tan solo un golpe, ha adjudicado la victoria al jugador Thomas Pieters en el Open de Holanda celebrado en Kennemer.
Público y jugadores esperaban un desempate en pos de la victoria cuando Lee Slattery tenía un pat de poco más de un metro para forzarlo e igualar el -19 del belga pero, asombrosamente, fallaba el golpe.
Pieters, que levantó el 30 de agosto el trofeo del Masters Checo, salió el domingo dos golpes por detrás de los líderes, Slattery y Rafa Cabrera-Bello, y se puso en cabeza con cuatro birdies en los 9 primeros. En el 10 hizo el quinto del día para llegar a -19, pero no pudo salvar el par del 11. Recuperó el -19 con otro birdie en el 13 y terminó con cinco pares para sumar un 65 (-5) a sus vueltas anteriores de 68, 66 y 62.
«Estoy contentísimo. Jugué mejor en Praga, pero esta semana me ha salvado el juego corto, metí dos muy buenos al principio de la vuelta y salvé un par importantísimo en el 9, en cambio tuve oportunidades en los últimos hoyos y no las pude aprovechar. Lee venía atacando por detrás y me alcanzó. Yo pensaba que me iba a faltar un birdie más, pero al final fue suficiente. Me ha parecido más difícil ganar aquí que en Chequia porque no le he pegado tan bien; estuve trabajando mucho el swing la semana pasada y todavía me queda mucho por mejorar. Ganar aquí, tan cerca de casa, ha sido muy especial. Quiero dar las gracias a los aficionados holandeses que gritaban mi nombre y me han apoyado en todo momento y a mi familia que está aquí conmigo».
Slattery y Eduardo de la Riva terminan empatados en -18, a un golpe de Pieters. Slattery, ganador del Open de Rusia la semana pasada, empezó con birdie en el 2 y siguió con siete pares, el del 9 gracias a un pat crucial de tres metros; siguió con birdies en el 12 y 14 para alcanzar al líder en -19, pero su bogey final le dejó sin opciones: «He tenido una buena posibilidad de ganarle y siento que lo he hecho todo bien, menos mandar a la izquierda el último pat. Me dejé dos pats desde 23 metros para salir a desempatar y eso es mucho pedir; tenía mucha presión y tiré mal el segundo, tengo que reconocerlo. Ha sido la primera vez que he sentido presión esta semana, pero en conjunto he hecho un gran torneo, he jugado muy bien y sigo ganando confianza».
Eduardo de la Riva ha firmado un brillante 63 (-7) con ocho birdies y un bogey para quedar a un golpe con -18. Después de hacer dos bajo par por los 9 primeros, empezó la segunda vuelta con tres birdies a partir del 10 y dos más en el 14 y el 17. Así valora su actuación de esta semana (66-66-67-63): «He jugado muy bien de tee a green y he metido muy buenos pats todos los días, cosa que no me pasaba desde hacía mucho tiempo. Siempre algún día me fallaba el pat o el juego. En este torneo he conseguido juntar cuatro vueltas muy buenas. Hemos tenido una semana soñada, no nos hemos mojado, que yo creo que aquí no había pasado nunca, y con el tiempo bueno y con un gran juego he conseguido hacer un grandísimo torneo… y con un buen amigo de caddie que me ha ayudado mucho. Hay mucho trabajo detrás de este resultado, pero lo más importante son las ganas que pongo en cada semana. Esta semana ha salido, y a ver si conseguimos que salga muchas más veces».
Fabrizio Zanotti termina cuarto en solitario con -17 después de un impecable 63 final con cinco birdies y un eagle. El paraguayo también hace un balance positivo de la semana (67-66-67-63): «Muy contento con la vuelta de hoy, ya que la segunda y la tercera venía jugando muy bien también pero no pude cerrarlas. Hoy me mantuve bien y gracias a Dios pude cerrar la vuelta; muy contento de empezar una gira larga de seis torneos seguidos de esta manera, con un buen resultado. Seis torneos son muchos, pero este año jugué poco así que estoy preparado para jugarlos».
Rafa Cabrera-Bello (71) termina séptimo con -15, Alejandro Cañizares entrega un buen 65 final con seis birdies para ganar 13 puestos y terminar decimosegundo con -13 y Álvaro Quirós (hoy 72) termina en el puesto 66 con +1.