El inglés, que llegó a Suiza en el puesto 159 de la Carrera a Dubái, lidera el Omega European Masters con vueltas de 64 – 66 – 64 para un total de 16 bajo par.
La hazaña de Storm ocurrió en el 11, un par 3 de 183 metros con la bandera corta muy pegada al bunker de la derecha. Se colocó en el extremo izquierdo del tee y pegó un hierro 6 que botó justo pasado el bunker y rodó hasta el fondo del hoyo.
Un golpe magistral que celebró con el entusiasmo que la ocasión merecía antes de ir a besar su nuevo BMW i8 valorado en unas 100.000 libras, expuesto detrás del tee.
Así lo cuenta su compañero de partido David Lipsky (el tercero era Shane Lowry):
«Ha sido genial. Primero Shane pegó un golpazo, yo la dejé más cerca y luego Graeme la metió. El público estaba entusiasmado, fue divertidísimo».
Storm se declaró «completamente eufórico», y añadió: «Ha sido una sensación increíble.
«Este año hice otro hoyo en uno en Marruecos y gané una lámpara. Ganar un coche me parece un sueño, sobre todo cuando acabo de vender el mío porque no teníamos dinero para tener dos coches.
«La bola iba muy justa por encima del bunker y pegó un bote local… creo que por todas las veces que he jugado en este campo».
Hasta el 11 Storm llevaba cuatro birdies y un bogey en el día. Terminó con tres birdies más y otro bogey su vuelta de 64(-6). En ese momento iba empatado en cabeza con Brooks Koepka que llevaba 17 hoyos impecables con seis birdies en el partido de detrás.
Pero el norteamericano terminó con un doloroso doble bogey en el 18 y retrocedió a -14.
El inglés Tommy Fleetwood va segundo con -15 después de un 63(-7) su mejor vuelta en el Circuito Europeo.
«Últimamente le estaba pegando muy bien en prácticas, pero lo difícil es hacerlo por el campo y hoy lo he hecho. Creo que no he pegado ni un solo golpe que no fuera en línea y he pateado bien, así que por fin he conseguido juntarlo todo».
A pesar de su pinchazo final, Koepka va tercero en solitario y saldrá mañana en el partido estelar.
«No te puedes quejar demasiado de un 66, pero me voy con mal sabor de boca. Fallé la salida y seguí estropeándolo con el segundo golpe.
«Mañana será otro día, voy a intentar no pensar en ello y espero que no me cueste demasiado caro.»
Igual que el jueves, las inmejorables condiciones del sábado han favorecido los buenos resultados en Crans-sur Sierre, donde solo han subido del par 17 jugadores.
Ha habido dos vueltas de 62(-8): la del italiano Marco Crespi libre de bogeys y la del irlandés Peter Lawrie con nueve birdies y un bogey.
Richie Ramsay, el líder del viernes, retrocedió de entrada con tres bogeys en los cuatro primeros, aunque luego se recuperó para terminar al par y mantenerse en -12.
En cuanto a los tres españoles que han pasado el corte, el mejor clasificado es Adrián Otaegui (hoy 67) en el puesto 40 con -5.
Nacho Elvira (hoy 68) y Álvaro Quirós (hoy 68) empatan en el puesto 52 con -4.
