No solo el título se van a disputar estos dos golfistas, salvo que haya laguna sorpresa de última hora y se una algún que otro actor al reparto, ya que para Luiten ganar sería un paso más que importantísimo para cumplir su sueño de ser el primer jugador holandés de la Ryder, mientras que para su rival, Wiesberger, supondría el debut en el Open USA en Pinehurst la semana próxima.
Ambos compartieron tarjetas de 66 golpes (-6), con siete birdies y un bogey, por lo que a pesar de los dos golpes de ventaja que lleva Luiten, la igualdad es máxima. El holandés comenzó con cinco birdies en los 9 primeros hoyos, que se vieron ligeramente frenados por su bogey del hoyo 14, aunque se recuperaría en el hoyo siguiente gracias a un birdie: «Lo único que puedo hacer es concentrarme en cada torneo, semana tras semana. Hoy he conseguido ponerme en buena posición, a ver si puedo rematar mañana», comentaba el golfista respecto a sus opciones de disputar la ansiada Ryder.
«Conozco bien a Bernd y mañana(por hoy) va a haber guerra. Además hay algunos buenos jugadores por detrás que se pueden meter en el torneo, así que va a ser un día interesante». Wiesberger, por su parte, neceista terminar primero o segundo (dependiendo de los resultados de otros torneos), para poder coger un billete de cara al Open USA.
«Tampoco quiero pensar en el US Open, solo intentar hacer lo mismo que hoy… bueno, eso es lo que decimos todos cuando llegamos al domingo en esta posición, lo difícil es hacerlo», analizaba el austríaco. La pelea está, por lo tanto servida, y únicamente al final del día se decidirá cuál de los dos, salvo sorpresa mayúscula, consigue el gran objetivo con el que llegaba a esta prueba.
En la parte española, Miguel Ángel Jiménez (68y -3) y Eduardo de la Riva (70 y -4) han conseguido subir en la tabla, colocándose decimosexto y décimo, respectivamente.