Tyrrell Hatton igualó el récord de Jon Rahm de cinco victorias en las Rolex Series al conquistar el Dubai Desert Classic tras una épica lucha con Daniel Hillier.
Hatton, estrella de la Ryder Cup, entró en la ronda final uno por detrás del neozelandés Hillier, pero logró un resultado de 69 golpes (-3) para terminar con 15 bajo par en el Emirates Golf Club.
Superó a Hillier, que firmó un 71, y Laurie Canter, que hizo un 68, quedó tercero con 13 bajo par.
«Es increíble», dijo Hatton. «A principios de semana dije que éste es uno de los eventos que te gustaría tener en tu currículum. Es un evento tan emblemático para el DP World Tour.
«Añadir mi nombre a la lista de los increíbles campeones que me han precedido, y que mi nombre figure ahora en ese trofeo, es un sueño hecho realidad».
«No voy a mentir, estaba bastante nervioso en los últimos nueve hoyos, para ser sincero. Supongo que quizás lo deseaba demasiado».
«Conocía la posición en la que estaba, y estaba un poco desaliñado en la última vuelta. Pero sí, ver ese putt dentro fue increíble. Estoy muy contento de ganar».
Tyrrell Hatton empató con un birdie en el segundo después de que un rebote afortunado desde el rough izquierdo hiciera que su golpe de salida se posara en el green antes de embocar un doble putt.
Daniel Hillier volvió a ponerse por delante con un birdie en el siguiente par-cinco, después de que Hatton se viera obligado a recuperar tras caer en un búnker.
Ambos jugadores fueron incapaces de aprovechar el largo 13 y Hillier hizo bien en salvar el par desde un búnker en el 15, mientras la batalla por el título se convertía en una guerra de desgaste.
La falta de birdies en la parte alta de la clasificación ofreció brevemente esperanzas a jugadores como Canter, Rory McIlroy, Shaun Norris y Niklas Norgaard.
Sin embargo, Hatton dio un paso de gigante hacia la victoria con un brillante wedge en el hoyo 16 que le permitió embocar un birdie.
En el 18 aún hubo tiempo para algunos nervios. Como era de esperar, Hatton se colocó en el hoyo, pero un enfoque conservador a la parte trasera del green para evitar que el agua entrara en juego le permitió intentar un birdie de trece metros.
Hillier había ido a por el green en dos y se había ido por la parte de atrás, pero hizo un nueve para birdie y dejó a Hatton una prueba de cinco pies, que convirtió debidamente.
Daniel Hillier dijo: «Es agridulce, eso seguro. Sí, no tuve mi mejor día, obviamente, pero luché duro todo el día, apenas me di una oportunidad en la recta final.
«Me quito el sombrero ante Tyrrell. Ha estado muy sólido en la recta final. Tiene clase.».
El japonés Keita Nakajima terminó el torneo a lo grande con un albatros en el par-cinco 18.
Rory McIlroy se guardó lo mejor para el final, ya que con 66 golpes se situó con 12 bajo par en la semana. Su cuarto puesto, empatado, representa su undécimo top-ten consecutivo en este evento, una racha que se remonta a su victoria en 2009.
