Álvaro Ortiz tuvo un fuerte comienzo y lo hizo justo al final para un 64, dándole una parte del liderato el viernes en el Abierto de México, mientras va por otra victoria en su país natal.
Esta sería la más grande de todas para Ortiz, quien ganó dos veces en la máxima gira profesional de México a finales del año pasado.
Álvaro Ortiz estaba en 11-bajo en el ventoso Vidanta Vallarta, empatado con Jake Knapp, Matt Wallace de Inglaterra y Sami Valimaki de Finlandia. Knapp hizo 64 golpes al final de la tarde, Wallace 65 y Valimaki 67.
Ortiz, que creció en Guadalajara, ha tratado de encontrar su camino desde que dejó Arkansas. Ya ha jugado el Masters como campeón latinoamericano amateur de 2019 y se ha clasificado para el Abierto de Estados Unidos de 2021 en el campo de golf de Torrey Pines.
Vuelve al Korn Ferry Tour este año después de pasar un tiempo el año pasado en algunos circuitos, incluido el PGA TOUR Américas.
«Cuanto más juego, más cómodo me siento y empiezo a darme cuenta de que tengo el juego», dijo Ortiz. «He estado haciendo un buen trabajo tratando de juntar cuatro rondas. Espero poder hacerlo este fin de semana».
Ortiz comenzó en los últimos nueve hoyos y salió en 31, haciendo birdie en los tres pares 5, añadiendo un par de birdies en el rango de del metro y medio. Hizo todos los pares en los nueve primeros excepto un eagle en el par 5 del sexto.
«Fue muy limpio, muy libre de estrés y me alegré de poder hacer ese eagle en el 6», dijo Ortiz. «Siento que estaba perdiendo un poco de impulso, pero fue bueno recuperarlo. Contento de estar en la posición en la que estoy».
El líder de la primera vuelta, Erik van Rooyen, logró un par de birdies en los últimos hoyos salvando un 69, dejando al sudafricano a un golpe.
Jorge Campillo sufrió en la segunda jornada entregando una tarjeta de 70 golpes. Iniciara el sábado en el puesto vigésimo séptimo.
