«No preveo que esta pierna vuelva a ser lo que era», dijo mientras se sentaba junto al presidente y consejero delegado de Hero MotoCorp, Pawan Munjal, y respondía a las preguntas de los periodistas durante unos 35 minutos.
Fue la primera rueda de prensa de Woods desde su terrible accidente de coche en Los Ángeles el 23 de febrero. Los cirujanos le insertaron una varilla en la tibia derecha, que tenía múltiples fracturas, y tornillos y clavos en el pie y el tobillo derechos. La amputación, dijo el martes, era una clara posibilidad en las primeras etapas.
«Es difícil explicar lo difícil que ha sido, estar inmóvil durante tres meses», dijo, y especialmente para un deportista que estaba tan acostumbrado a pasar buena parte del tiempo al aire libre.
«Tengo suerte de estar vivo, pero también de seguir teniendo la extremidad», añadió. «Son dos cosas cruciales. Fue un gran momento cuando pude salir al exterior por primera vez y sentir el sol en la cara”.
“Los días en los que jugaba a tiempo completo han terminado”, dijo. “Suponiendo que la pierna continúe mejorando”, añadió, “espero hacer salidas competitivas limitadas, como Ben Hogan después de su propio accidente de coche casi fatal. Estoy agradecido por lo que se ha evitado y por lo que todavía puede hacer”
Woods, que vestía pantalones negros y una camisa negra de camuflaje, parecía estar en paz con este cambio de paradigma en su carrera.
«Conozco la receta», dijo. «Sólo tengo que sentirme cómodo haciéndolo».
Sin duda, las remontadas han definido su carrera.
Cuando Woods ganó el TOUR Championship 2018, rompió una sequía de cinco años de victorias. Cuando ganó el Masters de 2019, después de cuatro operaciones en su espalda, incluyendo una cirugía de fusión que amenazaba su carrera, fue su primer grande en más de una década. Cuando ganó el ZOZO CHAMPIONSHIP en Japón a finales de ese año fue después de hacer bogeys en sus tres primeros hoyos.
Tal vez sea comprensible, Woods parecía cansado. Golpeó tres bolas al agua e hizo un 10, la puntuación más alta de su carrera, en el hoyo 12 de par 3 en el Masters de noviembre de 2020. Él y Charlie fueron el espectáculo en el Campeonato padre-hijo en Orlando hace casi exactamente un año, pero resultó que su espalda le dolía de nuevo, necesitando una quinta cirugía, una microdiscectomía para eliminar un fragmento de disco que le producía dolor en los nervios. Fue el anfitrión pero no jugó el Genesis Invitational. Entonces llegó el accidente.
Hogan volvió de un choque frontal con un autobús. Woods ganó el Open de Estados Unidos de 2008 en Torrey Pines con fracturas por estrés y una rotura del ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda. ¿Pero ahora? Ni siquiera él puede asegurarlo.
«Tal vez algún día sea lo suficientemente bueno como para poder salir aquí y competir contra estos tipos».
¿Podría jugar en la 150ª edición del Open Championship en St. Andrews el próximo mes de julio? Admitió que ciertamente lo desea. Es dos veces campeón del Open allí, y le encanta el campo.
«Físicamente, espero poder hacerlo», dijo. «Tengo que llegar allí primero».
Cinco Masters, cuatro PGA Championship, tres U.S. Opens, tres Open Championships, 15 títulos de grandes en total, tres por detrás de Jack Nicklaus. Dos The Players Championships, dos FedExCups, 106 victorias mundiales. Seis campeonatos nacionales de la USGA antes de convertirse en profesional.
¿Habrá más?, es difícil saberlo. Si alguien puede conseguirlo es él.
