Pablo Mansilla tiene, así, por delante otros cuatro años al frente de la entidad, que preside desde diciembre de 2016. Economista y auditor de cuentas de profesión, es un apasionado del deporte del golf y, muy especialmente, de sus Reglas, centrándose en el arbitraje y la dirección de torneos.
Precisamente en el año 2016, fue elegido por la Federación Internacional de Golf para velar por el cumplimiento de las Reglas de Golf en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, teniendo el privilegio de actuar como árbitro en la competición masculina, en una edición en la que el golf volvía a ser deporte olímpico tras más de un siglo.
Durante sus primeros cuatro años de presidencia, se ha dado una especial importancia a la promoción del deporte del golf y el crecimiento de jugadores, trabajando para que la Federación se sienta como una entidad cada vez más cercana, facilitando el acceso al golf al que no lo conoce, y haciéndolo más fácil y sencillo al que lo practica.
En este sentido, la Real Federación Andaluza de Golf cerraba el pasado año 2019 como la Comunidad Autónoma con mayor crecimiento en licencias de golf del territorio nacional, apoyándose en el desarrollo de actividades de promoción dirigidas a colectivos concretos, cámaras de golf en colegios o ‘Friends Cup’, entre otras acciones.
Además, a los éxitos deportivos de los golfistas andaluces y la celebración de más de 150 competiciones federativas cada año, se le suma el trabajo continuo para que Andalucía sea un referente en cuanto a apoyo al golf juvenil y al deporte de base, con el desarrollo, entre otras acciones, del programa ‘Golf Joven’, por el que más de medio centenar de campos de golf ofrecen precios especiales para que niños, familias y jóvenes disfruten del deporte con las mayores facilidades.
En cuanto a grandes eventos, y gracias a la colaboración continua y estrecha con las diferentes instituciones, Andalucía es sede inmejorable para grandes competiciones, como el Estrella Damm N.A Andalucía Masters o el Andalucía Costa del Sol Open de España Femenino, pasando por pruebas del Challenge Tour, Alps Tour y Santander Tour. Todas ellas permiten mostrar el destino de golf andaluz al exterior, apoyando a la industria turística, y creando referentes que acerquen el deporte del golf a aquellos que todavía lo ven como algo lejano.
Por delante quedan otros cuatro años de trabajo en favor del deporte andaluz y español.
