Cuando alguien como Jack Nickalus, diseñador de Cabo del Sol, define los últimos hoyos del Ocean Course como los mejores finales de cualquier campo de golf es difícil rebatirle. Sin embargo quienes han jugado replican, humildemente, que los hoyos 5, 6 y 7 son el corazón y el alma del recorrido.
Los hoyos 6, y 7 son pares tres que abrazan el Mar de Cortés y, según el viento, el hierro 7 será suficiente para alcanzar el green. El cinco es otra historia, es una prueba del juego, el valor y los sentidos del golfista. Un autentico desafío.
