Una vez recopilados los datos, se observa un incremento del 3,84% en el acumulado del primer semestre respecto al mismo periodo de 2016 lo que supone un incremento de 13.668 salidas en el periodo. Dato que hay que poner en valor teniendo en cuenta la climatología tan adversa que tuvimos en el mes de enero y que obligó a muchos campos a cerrar varios días.
Como se puede observar en el cuadro anterior, si nos ceñimos a los meses más fuertes de la temporada alta de primavera (marzo y abril) el incremento de salidas ha sido de un 6,28%.
A través del siguiente gráfico puede observarse como la curva de ocupación está claramente definida en lo que llevamos de año, pasando a ser valle en el periodo veraniego para despuntar a partir de fin de verano, alcanzando su cumbre de nuevo en los meses de otoño.
El gráfico muestra de manera inequívoca como la curva de ocupación del golf es inversamente proporcional a la estacionalidad vacacional del turismo de sol y playa, que tiene su momento álgido durante el verano.
Siguiendo la línea de tendencia el primer semestre, podemos augurar una temporada de otoño fuerte, y así se está ratificando con el volumen de reservas para los meses de octubre y noviembre 2017.
Estos datos ponen en evidencia el importantísimo carácter desestacionalizador del golf en la Costa Blanca, y la enorme contribución de este sector como uno de los motores de la industria turística de la provincia y de la Comunitat Valenciana, lo que ya demostró el estudio que realizó la Cámara de Comercio en mayo del 2016 por encargo del Patronato Provincial de Turismo y la Asociación de Campos de Golf de la Costa Blanca con unos resultados elocuentes.
El estudio también reveló que el turista de golf realiza un gasto muy superior a la media del turista tradicional, lo que repercute a su vez en otros sectores y actividades como hoteles, restaurantes, aeropuerto, comercios, taxis, rent a car, etc.
Más de un año después de ser presentado este estudio en la Costa Blanca, la Costa del Sol acaba de publicar el suyo siguiendo la misma estela. La recién creada Asociación Española de Campos de Golf también está trabajando en ello, lo que demuestra la importancia de poner de manifiesto los tremendos beneficios económicos y sociales que el golf genera en el territorio y llena de satisfacción a la ACGCB por haber sido pionera en esta iniciativa que está teniendo tanto éxito y seguimiento.
Uno de los objetivos de la Asociación de Campos de Golf de la Costa Blanca es, precisamente, transmitir que el golf no solo crea prosperidad y miles de puestos de trabajo, sino que además genera ecosistemas sostenibles y supone un ejercicio cardio-saludable.
Fuente: Asociación Campos de Golf Costa Blanca