El próximo jueves en Australia hará acto de aparición la andaluza Azahara Muñoz, quien arrancará la temporada tras casi tres meses de parón y entrenamientos en el doble duelo del LET y el LPGA Tour, el ISPS Handa Australian Open, torneo compartido entre ambos circuitos.
La vigente campeona del Open de España ha estado trabajando muy duro este invierno, con un nuevo entrenador y con la ilusión absolutamente renovada. Jamás dejó de ser competitiva. Ahí está su triunfo en Aloha el pasado mes de septiembre para atestiguarlo o su presencia irreductible en el top 50 del ranking mundial, pero sí sentía la propia Azahara que necesitaba aire fresco.
La golfista de San Pedro de Alcántara regresará en Australia, en un torneo donde acabó undécima la última vez que estuvo, hace ya tres años. Le hubiera gustado jugar antes en Bahamas, en la primera cita del año del LPGA Tour, pero una inoportuna apendicitis la dejó fuera de juego el tiempo justo como para no llegar a tiempo a esa semana.
Después de tanto tiempo, Azahara está con ‘mono’ de volver a competir. Está trabajando duro para recuperar la mejor versión de su swing, aquella, por ejemplo, con la que conquistó la emocionante International Crown con España. Está en ello y, sobre todo, quiere ver cómo está funcionando tanto trabajo en competición.
Azahara se unirá a Carlota Ciganda, Beatriz Recari, Belén Mozo y María Parra en este viaje a las Antípodas. Tres andaluzas en uno de los mejores torneos del mundo si bien estas dos jugadoras ya han participado esta semana en el Oates Vic Open, con un buen rendimiento, sobre todo en el caso de Mozo, quien estuvo entre las candidatas al título en la última ronda.
Así pues, hay ganas de ver a una de nuestras mejores representantes en acción y más tras su larga convalecencia. El golf femenino español volverá a rugir, en esta ocasión en las antípodas, con nuestras mejores representantes.