«Yo tengo una teoría: La Solheim Cup se gana en el campo, eso por supuesto, pero algún que otro punto se consigue también dentro del vestuario. Ahí es donde creo que radica principalmente la fuerza de Europa. Somos todas amigas y nos llevamos realmente bien. Las bromas son continuas y el ambiente es muy bueno.
No os voy a aburrir contando todo lo que hacemos, pero sí os quiero aclarar alguna que otra foto que veo que está circulando por las redes en la que, digamos, salgo de aquella manera. En una estoy con un vestido a lo Heidi y en el otro tengo puesta una máscara extraña. Es parte de la fuerza de este equipo de Europa».