El español lanzó su ataque con una impresionante segunda vuelta de 61 para compartir el récord del campo con José María Olazábal y Tiger Woods.
La pasada campaña llegó al domingo con tres golpes de ventaja y terminó quedando segundo ante un Rory McIlroy imparable que venía de levantar la jarra de clarete y ganó el Campeonato de la PGA la semana siguiente.
Pero siete birdies consecutivos no se olvidan fácilmente: «Fue una vuelta realmente buena, una de esas vuelta que te hacen disfrutar de verdad. Hice siete birdies seguidos por los 9 segundos y eso no ocurre todos los días. Siempre empiezo un torneo con la ilusión de hacerlo bien, pero aquí más. El año pasado estuve cerca de ganar y espero volver a estar ahí este año. El campo está muy distinto, mucho más duro y eso me gusta. Si no llueve va a estar difícil, pero es un buen reto».
García llega a Akron décimo en el ranking mundial, tras dos top 6 (Abierto Británico y Omega European Masters). Espera mantener su buen momento de forma esta semana en el Bridgestone y la próxima en el Campeonato de la PGA.
«Tuve dos semanas muy sólidas en el St Andrews y en Crans, y espero tener otras dos aquí en Estados Unidos».