El campo de Crandon Park parece que ha atraído la atención del multimillonario Donald Trump, quien tiene pensado realizar una fuerte inversión en el complejo para mejorarlo y devolverle el esplendor de tiempos pasados.
Su empresa presentó a finales del pasado año una propuesta al condado de Miami-Dade, ubicación donde se encuentra el mencionado campo, detallando su propuesta de acuerdo para el campo de golf de 18 hoyos frente a la bahía.
La afición de Trump por este deporte viene de hace años, ya que en el 2012 se decidió a comprar el centro de golf de El Doral, sede del famoso campo de golf Blue Monster, admeás de ser el presidente de una cadena de campos de golf a lo largo y ancho de toda Florida y de varios puntos del globo, por lo que Crandon Park sería un eslabón más en su cadena de triunfos.
Sin embargo, este emplazamiento requiere un especial cuidado, puesto que se ubica dentro de la red de parques del Condado.
Tal y como se ha publicado en el periódico del Nuevo Herald del Sur de Florida, Bruce Matheson, el miembro de la familia que cuenta con la autoridad sobre el acuerdo, dada la polémica restricción en su propiedad que da autoridad a su familia sobre las decisiones que tienen que ver con el parque, cuestionó por qué el campo de golf necesita ser rescatado, llamando la atención sobre el ranking de los campos de golf locales hecho por la publicación South Florida Business Journal, en el cual aparecen campos de golf propiedad de Trump en cuatro de los cinco primeros lugares (Crandon ocupó el tercer lugar).
«Si contamos con el campo de golf número 3, ¿para qué necesitamos a Donald Trump?»
Matheson se ha opuesto a cambios importantes al parque, incluyendo la propuesta de un torneo de tenis profesional que quiere expandir su presencia en Crandon; además, Russo, consultor de Trump, comentó que este no planea ningún tipo de urbanización comercial en Crandon, pero sí mencionó la posibilidad de que importantes giras profesionales regresasen al campo de golf.
Miami-Dade da a los residentes locales grandes descuentos en Crandon, donde jugar 18 hoyos durante el invierno cuesta $180 la ronda, pero sólo $85 en días entre semana a los residentes del condado, según los precios publicados. En el Trump Doral, jugar en el famoso Blue Monster cuesta $395 la ronda durante el invierno, y $175 por jugar en el Silver Fox, que es menos popular.
