Fue como un milagro, como el Medinah en la pasada Ryder Cup, o casi una aparición, aprovechando el paso del camino santo lebaniego que lleva hasta Santo Toribio. La presencia de José María Olazábal fue todo un acontecimiento en esta tierra cántabra acostumbrada a dar vida a mitos y leyendas, como la de Seve Ballesteros, o como el milagro de la recuperación de este campo de Santa Marína que hoy estaba en un estado excepcional para recibir a otro gran Maestro.
José María Olazábal llegó al Golf Santa Marina y fue una revolución. Hacía más de veinte años que el maestro de Hondarribia no participaba en un torneo de la PGA y eligió para volver este campo de Cantabría, uno de los últimos diseños de su gran amigo Severiano. A los pies de la estatua de Seve, JoseMari saludó al joven actor-jugador, José Luis Gutiérrez, que ha protagonizado una película biográfica sobre la vida del maestro de cantabría.
José María Olazábal, José Luis Gutiérrez, Miguel Ángel Saenz y Julián Vélez. Un maestro con dos Chaquetas Verdes, el joven actor que ha protagonizado a un adolescente Seve Ballesteros en el filme Seve. The Movie, el Consejero de Cultura y Deportes del Gobierno de Cantabria y el alcalde de San Vicente de la Baquera. Fue el partido estrella, un partido de cine, del Pro-Am que ha sido antesala de este XVII Campeonato de España de la PGA – Premio Liébana 2017.
Emocionado, sin duda, e ilusionado por compartir una semana con sus compañeros de profesión, y a los pies de la estatua gigantesca que preside Santa Marina, la mirada de JoseMari lo decía todo: “Siempre es emocionante participar en un evento como éste, en el que además, se hace un homenaje a Seve Ballesteros y a su tío Ramón Sota”.
“Con la estatua aquí de Seve, pues la verdad es que muchos recuerdos. El campo no lo conozco. Sé que lo diseñó Seve y ahora lo jugaré durante el Pro-Am y a ver qué tal”, comento Olazábal, que destacó también su apoyo a la PGA. “Siempre he dicho que me siento un profesional PGA, orgulloso de pertenecer a este colectivo. Es mi forma de apoyar a esta nueva Junta Directiva que dirige David Pastor. Hay gente nueva, nuevos aires y es verdad que intentan recuperar las relaciones, tanto con la Federación, como con las territoriales, quieren mejorar la situación, llevarla a buen puerto, y en ese sentido hay que darles un voto de confianza”.
De juego, la verdad es que Olazábal no está teniendo una buena temporada y como él mismo confiesa, está algo perdido. “De juego, de juego… La cosa está en crisis, económica en todo el mundo y en mi juego en particular. La verdad es que las últimas semanas han sido muy duras; he pegado a la bola mal, lo he pasado mal en el campo. A ver si en las próximas semanas, estando en casa un poco más tranquilo, recuperamos un poco las sensaciones”.
Sin duda, uno de los mayores atractivos fue el ver en el Tee del 1, en el mismo partido a José María Olazábal y a un joven golfista amateur José Luis Gutiérrez. Dicho así, a pocos dirá nada; pero el jugador de Cantabria ha protagonizado a un adolescente Seve Ballesteros en la película-documental que se ha rodado en la tierra natal del Maestro de Pedreña. Seve, The Movie fue rodada en Oyambre, Pedreña, Comillas, Cartes, Astillero o Santander, entre otros escenarios, y está protagonizada por el joven José Luis Gutiérrez, que encarna al deportista cántabro en su adolescencia. El filme, dirigido por John Paul Davidson y que combina la recreación de pasajes de la vida de Severiano Ballesteros con grabaciones de algunos de los momentos más destacables de su carrera, se estrenó en Gran Bretaña el 28 de junio.
“Estoy super nervioso. Para mi jugar con un ídolo como Olazábal es un sueño increíble. No sé si voy a ser capaz de darle a la bola en el Tee del 1”, comentaba José Luis Gutiérrez, el joven actor-golfista que compartía partido con el maestro vasco.
P.- JoséMari ha dicho de ti que tienes un swing muy parecido al de Seve, y él lo conocía muy bien…
José Luis.- Uff. Que va. Ójala jugara la mitad de bien que jugaba Seve. Sería un sueño y un aliciente para hacerme profesionales en el futuro. Sé que esta vida es muy dura; llevo jugando desde los cinco años, y espero hacerlo lo suficientemente bien como para ganarme la vida con ello, Pero ya veremos.
