Golf Confidencial Sin embargo el ocatvo hoyo del Old Course del Royal Troon Golf Club no anda escaso de drama. Tiene solo 118 metros, pero su dificultad es inmensa cuando se trata de alcanzar un greende solo siete metros en su parte más ancha. A esta dificultad hay que añadir los cambios de viento convirtiendo el hoyo más corto de la rotación del Open en uno de los más letales.
Probablemente dramático sea el mejor adjetivo para calificar al Royal Troon que albergo por última vez el Open en 1997. Cuando el viento sopla en el Old Course suelen ocurrir cosas extrañas en este clásico y ondulado campo, que esta lleno de elevaciones y hondonadas y considerado uno de los mejores recorridos del mundo.
Fundado en 1878 por un grupo de veinticuatro entusiastas locales, el campo estaba integrado por cinco hoyos, pero rápidamente creció hasta albergar el Open cinco veces entre 1923 y 1989, con grandes dosis de drama en todos ellos.
Si hablamos de drama, el octavo hoyo tiene de sobra. Por diseño es un hoyo sencillo, aprovechado la parte alta de dos dunas que se han aplanado para crear el tee y el green. Entre las dos dunas no hay ninguna zona segura, con espesos matorrales de hierba autóctona llenando cada metro cuadrado. Una gran duna protege el lado izquierdo del green mientras que a al derecha se halla un enorme búnker. Otros cinco rodean la superficie de pat, de modo que en realidad no hay elección: el único logar seguro es el centro de green.