Tiger Woods está usando muletas y una bota protectora en la pierna izquierda para estar seguro de recuperarse a tiempo para jugar en el Abierto de Estados Unidos.
Woods no cree que pueda jugar la próxima semana en el torneo Memorial en Dublin, Ohio, pero espera estar listo para el Abierto de Estados Unidos que se disputará del 16 al 19 de junio en el Congressional.
Woods tiene dolor en la rodilla izquierda, el tendón de Aquiles izquierdo, sufre contracturas en la pantorrilla y le duele la espalda baja.
Afirmó que sus médicos no le han dicho que tenga que ser operado.
«Ya me la han operado (la rodilla) cuatro veces», dijo Woods. «Obviamente, ya no está como cuando era niño».
El golfista estadounidense señaló que comenzará a entrenarse a mitad de la próxima semana. La respuesta de la pierna determinará cuándo podrá volver a golpear la pelota, lo que prácticamente lo descarta para el Memorial.
Eso significa que Woods llegaría al Abierto de Estados Unidos con poca competición para afinar su juego, aunque no sería la primera vez que lo hace.
En 2008, fue operado de la rodilla después del Masters y no volvió a jugar hasta el Abierto de Estados Unidos. Los médicos descubrieron dos fracturas por desgaste en la tibia izquierda en las semanas previas al major pero, en contra de las recomendaciones de los doctores, Woods jugó en el Abierto y ganó en un playoff de 19 hoyos.
Woods indicó que la pierna no está en tan malas condiciones como en aquella ocasión, aunque su juego es otra historia.
Woods está fuera de los 10 primeros puestos del ranking mundial por primera vez en 14 años
