Scottie Scheffeler, número 1 del Ranking Mundial, no se ha andado por las ramas en su primera comparecencia ante los medios de comunicación en el centro de prensa del Golf National.
El golfista norteamericano, uno de los principales candidatos el triunfo final en los Juegos Olímpicos de París 2024, asegura repleto de ambición que “ganar la medalla de oro es una de las razones por las que estoy aquí esta semana”.
El Golf National, un escenario bien afamado, que afronta el debut olímpico en el marco de su rica historia, sucumbe sin embargo ante la presencia de los verdaderos protagonistas, los jugadores, entre los que se encuentra el citado Scottie Schffeler, que aspira a sumar la tercera medalla de oro para Estados Unidos en la competición masculina de golf tras las conseguidas por Charles Sands en París 1900 y Xander Schauffele en Tokio 2020.
El número 1 del Ranking Mundial se encuentra entre quienes, más madrugadores, a la espera de que el martes llegue la totalidad de los participantes, han pasado ya por el campo para tener un primer contacto con las calles y los greenes del Golf National.
“El rough no está tan duro como en la Ryder Cup 2018, pero es un elemento del que mejor hay que huir”, manifestó antes de destacar la unión existente entre todos los representantes estadounidense, cuatro en total, componentes todos del equipo USA en la última Ryder Cup.
“Competir en unos Juegos Olímpicos no es algo habitual. De ahí que sea un torneo tan especial y que ganarlo adquiera tanto significado para mí”, resaltó quien tiene muchas papeletas para subir al podio el próximo 4 de agosto.
Golf National, un hervidero de actividad
Golf National, sede del torneo olímpico masculino y femenino del 1 al 4 y del 7 al 10 agosto, es, a tres días del inicio de la competición masculina, un hervidero de actividad. Centenares de supervisores, personal de mantenimiento, operarios de todo tipo de sectores y voluntarios se afanan en poner a punto una instalación que, desde que se pone el pie en ella, rebosa magnificencia.
Al Golf National le precede la bien merecida fama de recorrido con capacidad más que sobrada para albergar competiciones de prestigio desde que en 1991, fecha de su inauguración, acoge anualmente el Open de Francia. Su aldabonazo llegó en 2018, cuando celebró en su seno una Ryder Cup en la que, entre otros, Jon Rahm tuvo protagonismo en la victoria del equipo europeo sobre el norteamericano.
Jon Rahm: “es un campo muy exigente”
El golfista vasco, antes de aterrizar en París con la vitola de ganador del LIV Golf UK este pasado fin de semana, apenas cuatro días antes del comienzo de la competición olímpica, ya ha aseverado que “es un campo exigente, donde hay que hacerlo todo bien de tee a green, un campo que le va a mi juego, del que no te puedes esconder de ninguna manera. Si todo transcurre con normalidad, tendré opciones de ganar una medalla”.
Esa línea de opinión se reprodujo también entre los japoneses Hideki Matsuyama y Keita Nakajima, números 12 y 83 en el Ranking Mundial en la actualidad, que asimismo pasaron por el centro de prensa, donde ambos resaltaron la gran cantidad de retos que esconde el recorrido parisino, “donde es muy importante colocar bien la bola desde el tee de salida para que el segundo golpe te permita llegar a green en buenas condiciones. Cualquier duda o problema inicial puede generar un desastre”.
Mención especial merece el discurso de Hideki Matsuyama, donde el honor de representar a su país supone un hecho de incalculable valor. “Hace tres años, en los Juegos Olímpicos de Tokio, luché hasta el último momento por entrar en un playoff que hubiese llevado a una medalla”, ha rememorado con la ilusión de repetir experiencia.
Ni él ni su compañero Keita Nakakima lo tendrá fácil al igual que la gran mayoría de participantes, porque la competencia se antoja desde el primer momento enorme en un recorrido que espera de manera latente a que la maquinaria golfística de todos los participantes se ponga en marcha.
Un grandioso recorrido con numerosos retos en su seno
Eso sí, mientras llega el día 1 de agosto son miles los detalles que esconde la organización de un evento de las características del torneo olímpico, graderíos inmensos, zonas de descanso, delimitación de caminos y flujos de personas… cuestiones muy importantes que sin embargo ceden la atención al grandioso recorrido parisino en cuanto la vista, obligada por su intrínseca belleza, se posa sobre él.
Lo primero que llama la atención es la sensación de un campo tipo links con interesantes variantes que incluyen greenes con apreciables caídas, calles amplias y onduladas, obstáculos de agua y un buen número de bunkers jalonando su recorrido.
Mención especial para los cuatro hoyos finales, puro espectáculo, los hoyos que otorgan el sello de calidad definitivo, rodeados de obstáculos de agua que convierte al recorrido Albatros en un auténtico desafío, una magnificencia cederá terreno ante el protagonismo de aquellos que consigan las medallas.
Los ganadores del golf olímpico
2020 – Tokio
Competición masculina: Oro: Xander Schauffele (USA); Plata: Rory Sabbatini (Eslovaquia); Bronce: C.T. Pan (China Taipei)
Competición femenina: Oro: Nelly Korda (USA); Plata: Mone Inami (Japón); Bronce: Lydia Ko (Nueva Zelanda)
2016 – Río de Janeiro
Competición masculina: Oro: Justin Rose (Gran Bretaña); Plata: Henrik Stenson (Suecia); Bronce: Matt Kuchar (USA)
Competición femenina: Oro: Inbee Park (Corea); Plata: Lydia Ko (Nueva Zelanda); Bronce: Shanshan Feng (China)
1904 – St. Louis
Competición masculina: Oro: George Lyon (Canadá); Plata: Chandler Egan (USA); Bronce: Burt McKinnie (USA) y Francis Newton (USA)
Competición femenina: no se celebró
1900 – París
Competición masculina: Oro: Charles Sands (USA); Plata: Walter Rutherford (Gran Bretaña); Bronce: David Robertson (Gran Bretaña)
Competición femenina: Oro: Margaret Abbott (USA); Plata: Pauline Whittier (USA); Bronce: Daria Pratt (USA)