Drama, imprevisibilidad y golf de categoría en la 152ª edición del The Open que comenzó con una explosión en Royal Troon.
El número 272 del mundo, Daniel Brown, tiene el liderato en la casa club tras firmar un sublime 65 en un jueves absorbente que trajo consigo condiciones dispares, resultados dispares y una clasificación dispar, aunque emocionante.
Brown, que ganó su primer título en el DP World Tour en el ISPS Handa World Invitational 2023, hizo seis birdies y – quizás lo más impresionante – cero bogeys en condiciones difíciles para terminar con seis bajo par y ganar una ventaja de un golpe sobre Shane Lowry.
El jugador de 29 años se despidió a lo grande con un birdie en el 18 tras un golpe de aproximación de 170 yardas que se detuvo a dos metros del hoyo. Su reacción fue tranquila. Pero en el fondo le embargaba un sentimiento de emoción tras escalar a la posición con la que ha soñado toda su vida: el liderato en The Open.
Detrás de él hay un grupo de jugadores listos para atacar este viernes. Al frente de la cola está Lowry, el golfista campeón de 2019.
Al igual que Brown, jugó una ronda sin bogeys y también como Brown, hizo birdie en el 18 para un 66 que le deja con cinco bajo par.
Justin Thomas fue el más destacado por la mañana y mantuvo el liderato en la casa club con tres bajo par hasta que Lowry terminó poco después de las 20:00 hora local.
Thomas es tercero en solitario con 68 golpes en la primera ronda, mientras que por detrás, y todos por debajo del par, se encuentran jugadores de la talla de Justin Rose, Xander Schauffele, Scottie Scheffler y Brooks Koepka.
Por el contrario, muchos nombres conocidos pasaron apuros en una mañana difícil para la puntuación.
Rory McIlroy, Bryson DeChambeau, Ludvig Aberg, Tommy Fleetwood y Brian Harman llegaron a los nueve segundos por encima del par y no pudieron recuperarlo.
Harman, con dos sobre par, sigue en liza para defender la Jarra de Clarete, aunque tiene trabajo por hacer, especialmente con el putter.
«Todavía no está todo sincronizado», dijo el campeón de golf de 2023 después de sus 73 golpes.
«Pero estoy jugando un buen golf, así que sólo tengo que ser paciente y espero arañar unos cuantos más mañana».
Por la tarde, los espectadores acudieron en masa al tee del 1 para echar un vistazo a Tiger Woods. El tres veces campeón de golf regresó a Royal Troon por primera vez en 20 años y generó quizás el rugido del día cuando hizo birdie en el hoyo 3 desde diez metros.
Sin embargo, eso fue lo más destacado de un día difícil. Woods cometió un bogey en el hoyo 4 y un doble bogey en el 5, mientras que otros siete golpes perdidos ensuciaron su tarjeta de puntuación en el camino hacia un 79.
