24 de noviembre de 2024

Jon Rahm y Sergio García esperan contribuir a un domingo mágico

  • Este domingo puede ser un día deportivo muy especial en España.

La selección nacional de fútbol del país se enfrenta a Inglaterra en la fase final de la Eurocopa 2024. Si España gana el partido en Alemania, se convertirá en la primera nación en ganar cuatro Eurocopas.

 

El tenista español Carlos Alcaraz espera volver a jugar la final masculina de Wimbledon, siempre que supere su partido de semifinales de este viernes contra Daniil Medvedev. Si Alcaraz, tercer cabeza de serie, defiende con éxito su título, se convertirá en el primer tenista español en proclamarse campeón de Wimbledon de forma consecutiva.

Y en casa, en el campo de golf más famoso del país, los dos capitanes de LIV Golf nacidos en España y ganadores de Majors liderarán sus equipos en LIV Golf Andalucía. Si Sergio García, de Fireballs GC, o Jon Rahm, de Legión XIII, ganan el título individual en Valderrama, sería el primero como miembros de LIV Golf.

«Eso es un montón de ‘si'», dijo García el jueves cuando se le preguntó sobre el potencial de un Super Domingo en España. «Vamos a ir poco a poco. Despacio. Despacio».

Aun así, las posibilidades son tentadoras. El padre de Rahm, Edorta, mencionó el escenario de la triple corona deportiva a principios de esta semana a su hijo, y eso hizo que Rahm también charlara sobre ello.

«Le dije a unos amigos que si yo ganaba, Alcaraz ganaba y España ganaba este domingo, estaríamos en todos los canales del mundo», dijo Rahm.

Por supuesto, Rahm y García solo tienen la parte del golf bajo su control.

Sergio García ya ha experimentado el éxito en Valderrama, después de haber ganado el Andalucía Masters tres veces consecutivas en 2011, 2017 y 2018 (el evento no se jugó entre 2012-16). El año pasado, cuando LIV Golf hizo su primera aparición aquí, empató en el décimo puesto.

El jugador de 44 años, miembro original de LIV Golf, ha capitaneado a los Fireballs a tres títulos de torneos por equipos, pero aún no ha ganado un trofeo individual. Sin embargo, ha estado cerca de conseguirlo, ya que ha participado en tres playoffs, dos de ellos esta temporada: contra Joaquín Niemann en el torneo inaugural de Mayakoba (perdió en el cuarto hoyo de desempate casi en la oscuridad) y contra Dean Burmester en Miami (en el segundo hoyo de desempate).

Esos casi fallos son un indicio de que García está jugando bien. Sin embargo, no poder cruzar la línea de meta ha sido obviamente decepcionante. Quizá las estrellas se alineen esta semana en un club del que es socio.

«Sería increíble. Sería un sueño hecho realidad, seguro», dijo García cuando se le preguntó qué significaría ganar su primer título de LIV Golf en Valderrama. «Pero sé lo difícil que es. Sabemos la calidad del campo que tenemos. Nunca va a ser un hecho”.

«Pero ése es el objetivo, jugar bien, jugar consistente, darme una oportunidad, ayudar a mis compañeros tanto como sea posible, y ver si podemos conseguir un doblete. Obviamente, esa sería la semana soñada. Sólo es cuestión de salir ahí fuera y hacerlo lo mejor posible. Es todo lo que puedes pedirte».

Mientras que García está haciendo su 32ª salida en la LIV Golf esta semana, Jon Rahm está haciendo su novena después de unirse a la liga durante la temporada baja para capitanear su primer equipo de expansión.

El éxito del equipo llegó inmediatamente, en Mayakoba en el debut de Legion XIII, seguido de dos victorias más desde entonces, incluyendo en el más reciente torneo de la LIV Golf en Nashville. También fue la primera vez esta temporada que un ganador individual era también miembro del equipo ganador, aunque no fue Rahm quien completó el doblete, sino su compañero de equipo Tyrrell Hatton.

Rahm, de 29 años, ha hecho de todo menos ganar en su primera temporada en el LIV Golf. Es segundo en puntos por detrás del dos veces ganador Joaquín Niemann. Ha terminado entre los 10 primeros en todos los torneos que ha completado (tuvo que retirarse en Houston debido a una infección en el pie). Y lidera la liga en promedio total de golpes ganados, así como en total de birdies realizados.

Pero la falta de una victoria individual ha dejado a algunos inquietos, con miembros de los medios de comunicación españoles preguntándose esta semana por el estado de su juego.

Cuando se le pidió que se calificara a sí mismo del 1 al 10, Rahm respondió: «Es difícil de decir. Ha habido semanas en las que siento que he puntuado mucho mejor de lo que me sentía, y ha habido un par de semanas en las que podría haber sido mejor. Aún no he ganado, así que eso le restaría bastante.

«Diría que entre 6 y 7 puntos sobre 10, si tuviera que decirlo. Pero el año no ha terminado. Aún queda mucho por jugar. No sería raro ver a un jugador terminar fuerte y cambiarlo a un 9 sobre 10. Hasta ahora, sólo porque no he ganado, no puedo darle más de un 7».

En 2023, Rahm ganó sus dos primeras salidas mundiales, volvió a ganar en su quinta salida y aprovechó ese impulso para ganar el Masters en abril. Pero no volvió a ganar en sus 13 salidas restantes.

Tras incorporarse a LIV Golf en diciembre, obviamente ha tenido que hacer algunos ajustes en su calendario, en su mentalidad competitiva (menos margen para cometer errores en torneos de 54 hoyos) y en su condición de capitán del equipo, con todas las responsabilidades que ello conlleva. Aunque hay que aplaudir su regularidad, la falta de títulos en los seis primeros meses de 2024 contrasta fuertemente con la del año pasado.

«Está claro que ha habido cambios este año, pero hay un punto en el que tienes que acostumbrarte a ciertas cosas o afrontar otras», dijo Rahm. «Pero estoy muy a gusto donde estoy y con muchas ganas de seguir compitiendo porque sé que en cuestión de en un momento, en un swing, o un día eso lo cambia todo y puedes empezar una racha de buenas semanas».

Rahm, de hecho, se sentía muy bien con su juego en los días previos al LIV Golf Houston, pero la infección en el pie obviamente le frenó y le mantuvo fuera del US Open del mes pasado. Se recuperó la semana siguiente con un empate en el tercer puesto en Nashville, aunque siete golpes por detrás de Hatton.

Al igual que a García, a Rahm le encantaría que esta semana tuviera un final de cuento. Ha hecho tres salidas anteriores en Valderrama, con dos cortes perdidos intercalando un empate por el segundo lugar en 2019.

«Cada vez que vengo aquí es, llego a ese primer tee y veo lo hermoso que es y siento la esencia de Valderrama, me hace emocionar cada vez», dijo Rahm. «Por eso me siento avergonzado de no haber sido capaz de jugar mejor, y creo que por eso vengo con este entusiasmo infantil, con ganas de jugar bien, porque vuelvo rejuvenecido para poder jugar mejor».

Rahm, García y sus respectivos equipos esperan hacer ruido el domingo. Pero primero, tendrán que ponerse en liza durante las dos primeras rondas del viernes y el sábado… y luego esperar que se cumpla el escenario soñado por España.

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