Tras el “Milagro de Medinah” el equipo norteamericano no ve el momento de tomarse cumplida venganza el próximo mes de septiembre en Glenneagles. Es aún muy pronto para fijarse en las clasificaciones, tiempo habrá de analizar los equipos.
Esta semana, tres de nuestros jugadores debutaron en Sudáfrica. Miguel Ángel Jiménez, Gonzalo Fernández-Castaño y José María Olazábal no estuvieron finos en este estreno donde se enfrentaban todos los ganadores de torneos en 2013. Las declaraciones de todos ellos dejan claro su falta de rodaje en este primer torneo del año. Como suelen escucharse en esta época del año, están un poco “rusty” es decir oxidados.
Normal. Debemos analizar sus resultados como lo haríamos con un equipo que está en plena pretemporada. Miguel, que acaba de cumplir cincuenta años, aunque bien pareciera que tiene diez menos, afronta la temporada con la intención de volver a ganar un torneo y seguir aumentando su record de ser el jugador de más edad en lograr una victoria, soñando con hacerse con su primer grande aunque sea en Senior Open Cahmpionship. Gonzalo inicia la aventura en el PGA Tour, difícil experiencia que a buen seguro el madrileño afrontará con la garantía de su solidez con lo palos e inteligencia para superar las adversidades. Los grandes empiezan a estar marcados en rojo en su calendario. Finalmente José María Olazábal, “El gran capitán”, espera que por fin su cuerpo le permita disfrutar jugando al golf algo que no ha sucedido en los últimos tiempos.
Oostuhizen mantiene su trono en Durban, su elegante swing siempre da réditos. Será un fijo entre los favoritos en los grandes eventos. Mientras en Oahu, Walker vino desde las estrellas para imponerse en el Sony Open de Hawaii. La semana que viene comienza la gira del desierto un buen lugar para empezar a limar el oxido.