Al llegar al último día, Europa tenía una ventaja de dos puntos sobre sus contrincantes y sólo necesitaba cinco puntos para retener el codiciado trofeo.
El punto de Matilda Castren aseguró que Europa volviera a cruzar el Atlántico con el trofeo en la mano, mientras que Emily Kristine Pedersen, en el último partido del día, selló la victoria.
«Estoy muy orgullosa de este equipo. Al final del día, yo no doy ningún golpe de golf. Todo depende de ellas. Ellas son las que han ganado. Se merecen todo el crédito, así que gracias, equipo. Me habéis hecho quedar bien», explicó Matthew, que se convierte en la primera capitana europea en ganar la competición dos veces y en defender el trofeo.
«Fue realmente angustioso ver esos partidos finales. Cuando estás al margen no puedes hacer nada. Matilda hizo una fantástica recuperación desde el búnker y luego embocó un golpe de 18 pies para ganar su partido. La marea se había inclinado hacia las estadounidenses, y creo que volvió a inclinarse hacia nosotras, y luego Emily remató la faena con su victoria en el último hoyo».
Europa comenzó el día de forma brillante y se adelantó en el marcador cuando la novata Leona Maguire realizó un fantástico partido contra Jennifer Kupcho que la llevó a ganar 5&4.
La irlandesa ha tenido un debut fenomenal en la Solheim Cup, ganando 4,5 de los 5 puntos que disputó.
«Lo he dado todo esta semana. No podría haber dado nada más y no podría haber pedido una semana mejor», dijo Maguire. «He tenido dos compañeras fenomenales, Mel y Georgia, que me han dejado hacer lo mío y estoy muy orgullosa de haber conseguido esos puntos».
Otro punto se sumó pronto para Europa cuando Madelene Sagstrom consiguió una victoria por 3&2 sobre Ally Ewing.
Minutos más tarde, Celine Boutier se impuso por 5&4 a Mina Harigae y colocó a Europa en primera posición, con sólo dos puntos más necesarios para retener el trofeo.
«Ha sido una semana increíble. Hoy no he cometido ni un solo error, he jugado muy sólido desde el principio y eso me ha ayudado a conseguir la victoria», dijo Boutier. «La química del equipo ha sido increíble, todos nos hemos llevado muy bien, y creo que el hecho de estar aislados aquí entre todos los americanos nos ha unido más porque tenemos que aguantar y jugar los unos por los otros».
En una semana en la que muchos partidos llegaron al green del 18, la última jornada no fue una excepción y en el primer partido Anna Nordqvist y Lexi Thompson ganaron medio punto cada una para sus equipos.
El inicio de la remontada del equipo de EE.UU. había comenzado cuando Nelly Korda recuperó un punto con una victoria por 1 arriba sobre Georgia Hall, mientras que en el siguiente partido Nanna Koerstz Madsen y Austin Ernst redujeron compartieron el punto.
Las estadounidenses ganaron dos puntos más cuando Megan Khang y Brittany Altomare vencieron a Sophia Popov y Carlota Ciganda para poner el marcador en 13-11.
La retención del trofeo fue cosa de Castren, que se dirigió a la calle 18 uno arriba en su partido contra Lizette Salas.
La finlandesa realizó un excelente golpe desde el búnker para sellar el importantísimo punto 14 y asegurarse de que Europa no se fuera con las manos vacías.
«Fue genial tener a todo el equipo allí y ver los colores azul y amarillo en la banda y a la gente animando», dijo la campeona del Gant Ladies Open. «Sabía que ese putt era importante, pero no sabía exactamente cuál era la puntuación en ese momento. Sólo sabía que tenía que hacerlo. Mikey y yo elegimos una buena línea, y yo elegí el ritmo correcto, y entró directamente».
Con Europa ganando 14-11, las estadounidenses se adjudicaron otros dos puntos para recortar la distancia cuando Yealimi Noh y Jessica Korda derrotaron a Mel Reid y Charley Hull.
En el último partido, Pedersen iba 3 arriba a falta de tres hoyos, pero su rival, Danielle Kang, remontó hasta el 18.
En una revancha de la contienda final de 2017, fue la campeona de la Race to Costa del Sol de 2020 la que sacó lo mejor de la estadounidense esta vez, enterrando su putt de birdie para sellar una victoria europea absoluta.
«Fue un poco difícil, porque después del 15 sabía que habíamos ganado y quería celebrarlo con todo el mundo, así que tuve que estar muy tranquila. Me sentí muy bien al embocar ese último putt», dijo Pedersen. «Me alegré mucho por Matilda. Creo que todas nuestras novatas lo han hecho muy bien y Leona lo ha destrozado. Fue crucial para nosotras. Tuve que concentrarme en los tres últimos porque las veía y oía los ‘olés’. Fue bonito conseguirlo».
