En medio de escenas de euforia, cuando Donald pronunció un discurso en el podio de los ganadores tras la victoria por 16½-11½, resonaron los cánticos de sus tropas, que no han dejado de elogiar a su líder durante toda la semana.
Ha sido un camino muy largo desde el pasado mes de julio, cuando Henrik Stenson, designado inicialmente como capitán, dejó su puesto y Donald se incorporó poco más de una semana después.
Su primer trabajo fue retener a dos vicecapitanes en el victorioso líder de 2018 Thomas Bjørn y el gurú de las estadísticas Edoardo Molinari, y según su equipo y el consenso general, no ha puesto un pie en falso desde ese primer día.
«Creo que todos los que estamos aquí sentados estaríamos muy contentos de tenerle de nuevo», dijo Rory McIlroy -que con Donald tuvo su mejor Ryder Cup con cuatro puntos-.
«Confianza tranquila es lo que Luke ha sido esta semana. No tiene que decir muchas palabras. Las palabras que dice son muy, muy impactantes y ha estado increíble esta semana».
El cuatro veces ganador de un Major no fue el único en elogiar a Donald.
«Luke es increíble», dijo Tommy Fleetwood. «Todos estamos muy orgullosos de él, desde que empezó todo este proceso, ha sido tan, tan bueno.
«La forma en que ha estado esta semana ha sido fenomenal. Sinceramente, está muy arriba en todos nuestros… vemos a Luke a otro nivel.
«Ha estado increíble y estoy muy contento de que todos hayamos podido hacerlo por él».
Mientras que la construcción de un equipo de la Ryder Cup es en gran medida un proceso a largo plazo, el trabajo de Donald en la preparación inmediata a la espectacular bienal ha sido objeto de elogios particulares.
«Empezó probablemente hace un año, cuando Luke asumió la capitanía», añadió McIlroy. «El equipo empezó a tomar forma e hicimos ese viaje de entrenamiento aquí hace un par de semanas, y probablemente todo el mundo estaría de acuerdo conmigo, pero esa noche nos sentamos alrededor de la hoguera, charlamos y llegamos a conocernos muy bien.
«Fue una experiencia increíble. Llegué a saber cosas de estos chicos que… Pensaba que los conocía desde hacía mucho tiempo, pero descubrí algo diferente sobre ellos».
Las incorporaciones del trío del Milagro de Medinah, Nicolas Colsaerts, José María Olazábal y Francesco Molinari a su equipo de backroom también resultaron decisiones inspiradas por parte de Donald, al igual que sus planes en la semana de la Ryder Cup.
Fue Donald quien decidió -por primera vez en 30 años en suelo europeo- jugar foursomes antes que four-balls el viernes y el sábado.
«Creemos que como equipo, estadísticamente, somos más fuertes en foursomes dentro de nuestro equipo de lo que seríamos en four-balls», dijo. «¿Por qué no empezar rápido? Eso es».
Europa ganó la sesión inicial de foursomes por 4-0 y la sesión del sábado por 3-1 para igualar el mayor margen de victoria en foursomes desde que Europa entró en la Ryder Cup en 1979.
Y a ello contribuyó una estrategia de entrenamiento iniciada por Donald, junto con algunas apuestas amistosas.
«Fue algo que añadimos a las rondas de entrenamiento de esta semana», dijo Fleetwood el viernes.
«Todos los que jugamos juntos, jugamos algunos partidos de tres hoyos. Hay estadísticas que dicen que los chicos que suben temprano, hay un gran porcentaje de victorias.
«Ha sido la ejecución perfecta de un plan en el que todo el mundo ha empezado pronto y nadie ha aflojado. Ha sido estupendo ver que el trabajo de Luke, los vicecapitanes y los jugadores ha dado sus frutos».
