Sergio García no ha dudado tampoco en ir de la mano de la organización de la Ryder Cup y mostrar su apoyo a la decisión de cancelación para este año.
»Era lógico, había que hacerlo», comentaba en declaraciones a la revista Golfweek, junto con otros compañeros.
«Es una pena, obviamente es decepcionante, pero al mismo tiempo, es comprensible. Hay algunas cosas que son más importantes que las Ryder Cup. Tienes que respetar esta decisión. Hay muchas cosas malas que suceden en el mundo y tienes que resolver todo o estás poniendo en riesgo a más personas. Y una Ryder Cup sin gentw no es una Ryder Cup. Y una Ryder Cup con público podría crear un pico peligroso», añadía.
Otros jugadores como Luke Donald comentaron que la »PGA de América analizó muchas opciones diferentes para intentarlo, con un número menor de aficionados, quizás 10.000, pero no creo que tengan ninguna garantía de que puedan lograrlo. Estos son tiempos muy inciertos y la Ryder Cup necesita la energía, las multitudes».
Por su parte, Patrick Reed, admitía que »si no sabes si puede ser seguro para los jugadores y para todos los involucrados, definitivamente es la decisión correcta hasta que todos puedan sentirse más cómodos y sea seguro. Jugar sin fans, o jugar con el 50% de ellos no sería lo mismo, no sentiría lo mismo. Sería difícil para los equipos levantarse y jugar con el carácter que normalmente se ve en las Ryder, con esa emoción».
«Creo que para la Ryder Cup los aficionados lo son todo. No estaba en contra de jugar sin su presencia pero hay que reconocer que la Ryder Cup destaca por ese ambiente, por esa multitud de gente, por lo que es la decisión correcta. Como europeo, creo que habría sido una ventaja claramente haber jugado sin público, pero creo que no se trata de eso, ¿verdad? Creo que se trata de un espectáculo y creo que la Ryder Cup es en realidad uno de los eventos que tenemos que es más grande que el propio juego del golf, atrae a los fanáticos del deporte, por lo que creo que es importante hacerlo de la manera correcta», expresaba por su parte Justin Rose.
