Los preparativos para la Ryder Cup fueron emotivos e inspiradores. Hubo risas y algunas lágrimas. Los jugadores de ambos equipos estuvieron de acuerdo en la importancia de unirse por una causa.
Y eso fue antes de golpear siquiera una bola el miércoles.
Un día lluvioso en el campo Celtic Manor hizo que la atención se enfocara sobre los camerinos, e incluso allí hubo una especie de competencia.
El capitán estadounidense Corey Pavin reunió a sus jugadores para un mensaje de Dan Rooney, un piloto de combate de Oklahoma que es veterano de la guerra en Irak y un golfista profesional.
«En realidad fue bastante emotivo, pero una emoción de la buena», dijo Pavin. «Todos estaban muy callados cuando habló».
La voz en el camerino del equipo europeo se escuchó por teléfono, y fue de Severiano Balleteros, una leyenda del golf europeo en la Copa Ryder. El español, que se recupera de un tumor cerebral, no puede viajar.
«Tenemos suficiente motivación en nuestro camerino», dijo el capitán Colin Montgomerie. «Estaba buscando algo de pasión, y la conseguí».
Ballesteros parecía que quería salir al campo.
«Péguenle tan duro como para que en el futuro quieran ser caddies», les dijo Ballesteros, según la página de internet de la federación de golf de Suecia.
Un punto para Europa.
El equipo de Montgomerie tuvo que esperar más de una hora para salir al campo debido a la constante lluvia que empapó Celtic Manor. Cuando los jugadores llegaron al primer tee, el capitán quedó encantado con lo que vio. Marin Kaymer, Luke Donald, Graeme McDowell y los caddies estaban utilizando pelucas parecidas al pelo de Rory McIlroy.
Montgomerie dijo que el norirlandés de 21 años, que disputa su primera Copa Ryder, estaba «bastante molesto» sobre la cobertura de la prensa de su riña con Tiger Woods. McIlroy fue citado hace seis semanas diciendo que le «encantaría» enfrentar a Woods en la Copa Ryder, y Woods contestó «a mi también» cuando le preguntaron al respecto el martes.
«Se estaba saliendo de control, en cuanto a los tabloides», dijo Montgomerie. «Lo que hicimos fue encontrar siete pelucas -quien sabe cómo las hacen, pero las hacen, especialmente así- y los caddies y los jugadores que estaban jugando con él decidieron bromear con Rory en el primer tee para hacerlo sentir parte del equipo».
Phil Mickelson no reveló detalles sobre lo que se habló en el camerino de Estados Unidos, pero señaló que los jugadores prestaron mucha atención al discurso.
«Fue fascinante», sentenció.
El jueves es el último día de prácticas antes de la ceremonia inaugural, en la que Montgomerie y Pavin anunciarán los duelos de fourballs para la primera ronda del viernes.
