Golf Confidencial . A pocas horas del inicio del cuarto y último Major de la temporada, Tiger Woods se siente con la moral por las nubes y comentó que los errores no serán penalizados «de manera severa» en Kiawah Island (Carolina del Sur). Sin embargo, seguro que no todos sus rivales pensarán lo mismo ya que saben que están a punto de medir sus fuerzas con el recorrido más complicado y exigente de todos los Estados Unidos según el ranking de la revista ‘Golf Digest’.
El Ocean Course tiene cerca de 7.000 metros (el más largo de la historia de este torneo), carece de bunkers y árboles y, además, su proximidad con la costa atlántica le convierte en diana perfecta para los fuertes vientos oceánicos. En este escenario temible, y sin tener en cuenta las lluvias caídas y por venir, estarán presentes siete españoles. Todos menos uno afrontan su última oportunidad para lograr una plaza en el equipo europeo de la Ryder Cup que capitaneará José María Olazábal. Sergio García, Álvaro Quirós, Gonzalo Fernández-Castaño, Rafael Cabrera-Bello, Pablo Larrazábal y Miguel Ángel Jiménez tratarán de hacer historia en tierras norteamericanas.
El golf nacional no cuenta con un ganador de Grand Slam desde que Olazábal conquistase en abril de 1999 su segunda Chaqueta Verde en Augusta. Trece años después, quizá las urgencias por estar presente en la lista de Olazábal haga posible lo que a priori se presenta como una gesta. Por el momento, sólo Sergio tiene los puntos acumulados necesarios para figurar en el equipo europeo. No obstante, el margen del castellonense es estrecho y no puede permitirse una mala actuación en esta prueba.
Las ilusiones locales
Todo el público y hasta la prensa estadounidense tiene sus miradas y sus esperanzas depositadas en Tiger Woods. Sueñan con ver al de Cypress como ganador de este PGA Championship, lo que le volvería a convertir en el número 1 del Mundo y aumentaría a 15 sus títulos de Grand Slam.
A sus 36 años, Tiger destacó: «Imagino que alcanzar los 18 Grandes de Nicklaus me llevará toda mi carrera. Jack ganó su último Major a los 46 años, así que bajo ese prisma aún tengo 10 años y unas 40 oportunidades más para ir sumando. Me siento bien. Este año puedo practicar después de cada torneo, lo que no podía hacer antes. Mi juego ha evolucionado lo suficiente como para poder asimilar las cosas que Sean Foley quiere que haga en el campo«.
Tal y como se ha podido saber, Woods jugará las dos primeras rondas junto a los dos últimos campeones del torneo, su compatriota Keegan Bradley, que viene de ganar la semana pasada en el Brigestone, y el alemán Martin Kaymer.
La convocatoria de la 94 Edición del PGA Championship reunirá a todas las grandes estrellas mundiales de este deporte, con una secuencia curiosa que se repite desde este mismo torneo en agosto de 2008: todos los ganadores de Grand Slam (dieciséis) fueron diferentes. ¿Será el próximo nombre no repetido el de un español?