Hoyo 1. Par 4. 445 Yardas. «Tea Olive»
Augusta National comienza con un par cuatro dog-leg hacia la derecha. La calle a primera vista es ancha, pero un gran bunker defiende la parte derecha de la calle estrechándola y obligando a jugar por el lado izquierdo a aquellos que no estén dentro del grupo de grandes pegadores. Una vez superada la salida, el segundo personaliza lo que el campo exige una y otra vez, máxima precisión en los golpes a bandera. El green, con gran elevación y múltiples posiciones a bandera, no concede recuperaciones sencillas especialmente cuando se falla por el lado de la bandera. En general el cuatro es un buen resultado.
Hoyo 2. Par 5. 575 Yardas. «Pink Dogwood»
El primer par cinco del recorrido representa la primera gran oportunidad de adelantarse al campo. El hoyo es alcanzable de dos golpes cuando el viento es favorable. De nuevo un bunker estrecha la caída de driver y vuelve a dar la iniciativa a los grandes pegadores. No obstante, el hoyo comienza más adelante, con el tercer golpe. Tras una espectacular bajada, los que no pueden tirar a green de dos golpes deben favorecer la parte derecha de la calle ya que se van a encontrar con un golpe corto cuesta abajo teniendo que parar la bola en un green que recibe de izquierda a derecha. El green de este par cinco empieza a mostrar las grandes dimensiones y pronunciadas caídas que caracterizan este escenario. El birdie se debe conseguir.
Hoyo 3. Par 4. 350 Yardas. «Flowering Peach»
El hoyo tres es un par cuatro corto, cuesta arriba y prácticamente recto. El hoyo permite al jugador optar por dos tácticas diferentes, la más utilizada consiste en jugar un hierro desde el tee eludiendo los bunkers de la izquierda y procurándose con un hierro corto un golpe entero, con la posibilidad de máximo freno, al green más pequeño del campo. La otra opción que se empieza a utilizar cada vez más consiste en buscar green con un gran drive y en caso de no llegar, que el fallo sea por la izquierda, confiar en la magia del juego corto. El green cae mucho de derecha a izquierda por lo que conviene patear desde la izquierda del hoyo. Es frecuente ver buenos golpes salirse de green por el backspin y la pendiente. Es un hoyo duende que concede y arrebata de forma caprichosa.
Hoyo 4. Par 3. 240 Yardas. «Flowering Crab Apple»
Primer par tres del recorrido. Golpe largo desde un tee en alto a un green en alto. Por primera vez el jugador tiene que acertar con la dirección de un viento que es traicionero y cambiante. Un verdadero test de intuición. El green recibe de atrás a delante y la presencia de dos importantes bunkers, corto a la derecha y por el lado izquierdo, es suficiente para crear los primeros problemas serios a los jugadores. No hay que olvidar que el Amen Corner de la primera vuelta comienza en este hoyo. La bandera corta destaca a los jugadores especiales desde la arena. Tres es un buen resultado.
Hoyo 5. Par 4. 455 Yardas. «Magnolia»
Par cuatro dog-leg a la izquierda. Driver en subida teniendo que eludir un bunker situado en la parte izquierda de la calle. El bunker es profundo y penalizador. Un buen driver permite un golpe de hierro medio a un green, de nuevo en alto, con múltiples plataformas. La precisión en el golpe a bandera de nuevo cobra vital importancia aunque la recuperación de un hierro fallado permite una recuperación cómoda siempre que no se falle largo.
Hoyo 6. Par 3. 180 Yardas. «Juniper»
De nuevo un par tres donde la diferencia de altura entre el tee, en alto, y el green, más abajo, hace que la elección de palo sea una ardua tarea. La posición de bandera larga a la derecha, la parte más alta del green, es el objetivo más pequeño de alcanzar de todo el green, aunque el golpe certero suele recompensarse con una clara opción de birdie. Los fallos por la derecha del green son duramente castigados puesto que el green recibe con una caída principal de derecha a izquierda. En 1991 Olazábal firmó 7 golpes siendo éste el registro mayor realizado en este hoyo.
Hoyo 7. Par 4. 450 Yardas. «Pampas»
Par cuatro corto con salida hacia abajo y una calle que cae abruptamente hacia la derecha. Probablemente una de las calles más estrechas del recorrido donde incluso desde la misma puedes encontrarte tapado por las ramas de los pinos. El efecto de derecha a izquierda es necesario desde el tee para contrarrestar la inclinación de la calle. Una vez posicionado, el segundo golpe se juega cuesta abajo hacia un green con poca profundidad y situado en alto por lo que tener capacidad para dar altura a la bola se hace fundamental. Los bunkers defienden con efectividad al green, y pasarse al bunker trasero es prácticamente sinónimo de bogey.
Hoyo 8. Par 5. 570 Yardas. «Yellow Yasmine»
El segundo de los pares 5 muestra ciertas similitudes con el hoyo 2. En ambas ocasiones un bunker colocado a la derecha de la calle, y a la altura de la caída de driver, estrecha la salida y obliga a la mayoría de jugadores a orientarse al lado opuesto desde donde pierdes ángulo en el golpe a green. El segundo golpe es largo y en subida con un green sin visibilidad y escondido en la parte izquierda. Por esta razón la necesidad de cerrar la bola (abrir para los zurdos) de forma exagerada es fundamental para poder tener acceso al green de dos golpes. En caso contrario, la precisión en el tercer golpe es la clave del hoyo. El green se defiende sólo, sin necesidad de bunkers. Un nervio producido por un gran montículo situado a la izquierda de green penetra dentro del mismo siendo éste el principal problema al que se tienen que enfrentar los jugadores.
Hoyo 9. Par 4. 460 Yardas. «Carolina Cherry»
Originariamente el hoyo 18, la salida del hoyo 9 exige de nuevo un driver largo y cerrado para contrarrestar la inclinación de la caída de la calle. El lado izquierdo crea muchos problemas porque el hoyo vuelve a girar a la izquierda. Al igual que el hoyo 7 el segundo golpe se hace cuesta abajo a un gren en alto por lo que, de nuevo, es necesario levantar la bola con rapidez. El green es largo y con varias plataformas. Importante estar por debajo de la bandera excepto cuando la bandera está corta ya que corres el riesgo de alejarte del green muchos metros cuando la bola pierde el contacto con el green.
Hoyo 10. Par 4. 495 Yardas. «Camelia»
La salida de este par 4 es sin duda la más espectacular del campo. Un golpe hacia abajo con una importante caída hace que se registren las salidas más largas del campo. Aún así el hoyo exige un golpe cerrado (abierto para los zurdos) ya que de esta manera se ganan los metros necesarios para poder afrontar el segundo golpe con garantías de control. Si la bola no se cierra, el hoyo se alarga mucho y empieza a entrar en juego el bunker de la derecha de green. El segundo golpe se juega cuesta abajo a un green que te recibe inclinado hacia la izquierda por lo que un golpe con efecto de izquierda a derecha es, a priori, la mejor elección. Los fallos por el lado izquierdo son duramente penalizados. Conviene jugar el palo justo para de esta forma patear cuesta arriba.
Hoyo 11. Par 4. 505 Yardas. «White Dogwood»
El primero de los hoyos que componen el conocido Amen Corner requiere una salida larga apoyada en el lado izquierdo de la calle. El hazard que defiende el green por la izquierda hace que el golpe a green sea más franco desde la izquierda, además el público no tiene acceso por ese lado por lo que la bola tiende a hacer muchos metros por este lado y el segundo golpe se acorta considerablemente. El green cae de derecha a izquierda hacia el agua y aunque el lado de apoyo es la derecha, la recuperación desde la derecha de green resulta muy complicada. Un cuatro en este difícil hoyo siempre es un buen resultado.
Hoyo 12. Par 3. 155 Yardas. «Golden Bell»
El par tres más corto del campo, y a la vez, el hoyo al que más miedo se tiene. La historia ha ayudado a engrandecer su leyenda y los silencios que se escuchan en este tee no se oyen en ningún lugar del recorrido. El viento en esta zona del campo se arremolina con mucha frecuencia por lo que la duda en la elección de palo es el principal problema. El green diseñado en diagonal complica aún más la tarea. Largo es malo, corto peor y posiblemente los bunkers de este green sean los lugares menos malos para un golpe que no alcance el green.
Hoyo 13. Par 5. 510 Yardas. «Azalea»
Un par cinco con un giro a la izquierda (dog-leg) extremadamente marcado. La salida te pide un hook (slice para los zurdos) y muchos jugadores han tenido que recurrir a la madera tres para conseguirlo. Exagerar el efecto supone entrar en contacto con rae creek, sin embargo el mejor ángulo para afrontar el segundo golpe es al lado del mismo. No conseguir cerrar la bola te hace entrar en una zona arbolada desde la cual estás prácticamente obligado a renunciar a buscar el green de dos golpes. Si se intenta el green de dos golpes, fallar por la derecha supone visitar rae creek de nuevo, pero casi peor es apoyarte en exceso por la izquierda porque el approach es extremadamente complicado y de nuevo el agua entrar en juego para el tercer golpe. El hoyo por tanto exige máxima precisión. Hasta el approach de tercer golpe resulta más incómodo de lo normal ya que la calle tiene una marcada inclinación de derecha a izquierda. No obstante, los jugadores se exigen el cuatro en este hoyo.
Hoyo 14. Par 4. 440 Yardas. «Chinese Fir»
Par cuatro dog-leg hacia la izquierda. Un hoyo donde conviene cerrar la bola para compensar la caída de la calle en el sentido contrario. En caso de fallar es mejor hacerlo por la derecha desde donde hay más posibilidades de encontrar hueco hacia el green. El hoyo tiene en el diseño del green la principal característica. El green está en alto con cuatro plataformas bien diferenciadas y exige que el jugador acierte en su segundo golpe con la plataforma adecuada de lo contrario la sombra de los tres putts aparece. Es probablemente el green que más identifica al Augusta National. El cuatro nunca es malo.
Hoyo 15. Par 5. 530 Yardas. » Firethorn»
Último par cinco del campo y un hoyo que siempre tiene algo que decir en el desenlace final de la cuarta jornada. En general Augusta National es generoso con los pegadores pero probablemente en este hoyo lo sea todavía más. El giro que hace la calle hacia la derecha hace que el golpe ideal sea un fade (draw para los zurdos). Un grupo de montículos en la esquina de la derecha de calle es la referencia que hay que sobrevolar para encarar el hoyo con éxito. El fallo por la izquierda está bloqueado por las ramas de los pinos que entorpecen el golpe a green y obligan a jugar corto. Los pinos de la derecha de calle te obligan a jugar de igual forma. El green es grande y atrae al jugador que ha conseguido una buena salida. Recibe de atrás a adelante y tiende a estar muy duro. Alcanzar este green con un palo corto es vital para poder parar la bola en green. La recuperación desde detrás de green supone un gran reto hasta para los jugadores más finos con el juego corto. El tercer golpe desde antes del agua de nuevo te enfrenta al desafío de jugar un golpe cuesta abajo desde donde no se suelen ver birdies. El anónimo bunker de la derecha de green puede llegar a ser un punto de apoyo en las banderas colocadas por la derecha, aunque la posición estrella desde hace varios años es corta a la izquierda.
Hoyo 16. Par 3. 170 Yardas. «Red Bud»
El más espectacular y a la vez más sencillo de los pares tres de Augusta National. La extrema inclinación del green hace que éste sea el protagonista del hoyo. A veces tremendamente injusto con golpes certeros, la principal consigna es no estar por encima del hoyo. Si además visitas alguno de los bunkers de la derecha el hoyo se puede complicar de verdad. Las banderas del lado derecho de green son claramente más complicadas que las de la izquierda.
Hoyo 17. Par 4. 440 Yardas. «Nandina»
Un enorme pino en el medio de la calle, y en distancia de driver, convierte el driver en el primer problema que solventar para los que no pegan fuerte. El segundo golpe requiere una gran capacidad de freno ya que el green del 17 suele ser uno de los más duros del campo. La principal caída del green es de izquierda a derecha por lo que conviene apoyarse por la parte derecha de green. El diseño en alto del green hace que el fallo por la derecha y por detrás de green tengan recuperaciones extremadamente complicadas.
Hoyo 18. Par 4. 465 Yardas. «Holly»
Una salida tremendamente estrecha entre árboles hace del primer golpe del hoyo 18 una de las más exigentes del recorrido. Fallar por la derecha te deja totalmente bloqueado e incluso con un driver en calle, aparentemente bueno, puedes no tener golpe claro a green.. El segundo golpe es cuesta arriba a un green con varias plataformas defendido por tres bunkers. A pesar de no ver con claridad toda la bandera (golpe semi-ciego), el golpe a green es de los más francos del campo y siempre que la bola no acabe por encima del agujero, el hoyo te da una última oportunidad.
