Después de un magnífico mes de mayo en lo que a la climatología se refiere, no pudo darse peor mala suerte el día de la competición, pues amaneció un día completamente lluvioso. Para mayor desgracia, una lluvia torrencial a la hora de comienzo de la competición, hizo que la salida a tiro de los partidos fourball se tuviera que aplazar media hora. Pese a ello, los primeros hoyos de los partidos diez partidos matinales se disputaron bajo una persistente lluvia que no sólo puso a prueba el juego de los participantes sino también su gran afición y compromiso con la competición.
En estos primeros partidos fourball los representantes de “Manuela Moraga” desplegaron un juego sólido frente al que poco pudieron hacer sus rivales, llevándose a su casillero 6,5 puntos de los 10 en disputa. Sin embargo, los jugadores de “Cristina Escrivá de Romaní” no habían dicho su última palabra. Así, tras la comida en la que los jugadores de uno y otro equipo mezclados compartieron un rato distendido, la historia cambiaría.
De inicio el sol quiso igualmente unirse a la competición pero mediada la tarde la aparición del viento y, sobre todo, de los negros nubarrones que empezaron a cubrir el cielo de El Encín obligó a los jugadores a mostrar nuevamente su mejor juego. Ni siquiera varios chaparrones torrenciales hicieron que los partidos se detuvieran y hasta ocho partidos tuvieron que llegar hasta el hoyo 18 para decidirse.
Si inicialmente los partidos se encontraban bastante igualados, poco a poco el marcador fue tiñiéndose del blanco de los de “Cristina Escrivá de Romaní” y hasta diez partidos cayeron del lado de ellos haciendo que el resultado parcial existente durante la mañana diera un vuelco. Finalmente, un ajustadísimo 14,5 a 13,5 les dio la victoria dejando con la miel en los labios a los azules de “Manuela Moraga”.
Si la primera edición reflejó un empate, la exigua diferencia de esta segunda demuestra la grandísima igualdad de una competición cuyo formato permite una competitividad llevada a su máxima expresión en un ambiente inigualable de compañerismo y amistad. Desde luego la tercera edición promete y se antoja igualmente espectacular.
Tras la competición se celebró la correspondiente entrega de premios así como un generosísimo sorteo de regalos aportados por todos los participantes en el que no faltó el aspecto solidario.