En un escenario donde los españoles han brillado con luz propia, Carla Bernat escribió el sábado un nuevo capítulo en la historia de la brillantez española en el Augusta National.
Carla Bernat embocó un putt de metro y medio para par en el último hoyo, ante un nutrido público, y ganó el Augusta National Women’s Amateur por un golpe de ventaja sobre Asterisk Talley. La española hizo un 68 (-4) en las tres rondas del Campeonato para terminar con 12-bajo par, batiendo el récord de puntuación por dos golpes.
«Me siento increíble», dijo Carla, de 21 años y estudiante de último curso en la Universidad Estatal de Kansas. «Me siento como en la luna».
Poco después de firmar su tarjeta, Carla salió y recibió un abrazo de felicitación de José María Olazábal, bicampeón del Masters y uno de los cuatro españoles que han ganado la Chaqueta Verde. Tal y como hicieron el gran Seve Ballesteros, Sergio García y Jon Rahm. Además de Estados Unidos, ningún otro país ha tenido tantos ganadores del Masters.
«Ha manejado la presión muy bien», dijo Olazábal. «Fantástico para el golf español y para el golf femenino».
Cuando se le pidió que explicara el éxito de los españoles en el Augusta National a lo largo de los años, empezando por la primera de las dos victorias de Ballesteros, en 1980, Olazabal dijo “que el campo exige control de la distancia y delicadeza. Los jugadores españoles suelen tener buenas manos”.
Carla Bernat dijo que estaba encantada de ver a Olazabal y recibir sus palabras de elogio.
«Significa mucho para mí porque es un símbolo para España», dijo, añadiendo con timidez que hace un año le llamó erróneamente por el apellido de Pablo Larrazábal.
Carla comenzó la ronda empatada en el tercer puesto, a un golpe de las líderes tras 36 hoyos, la estadounidense Kiara Romero y la defensora del título, la inglesa Lottie Woad. Con cuatro birdies y un bogey en sus primeros nueve hoyos, se colocó en cabeza con un golpe de ventaja.
Su primera gran prueba llegó en el par 4 del hoyo 10. Después de un fuerte drive por el centro de la calle, empujó su segundo golpe a la derecha del bunker del green, en una pendiente de hierba donde la bola estaba muy por encima de sus pies. Siguiendo un consejo que aprendió de su amigo José Luis Ballester, que como vigente campeón amateur de EE.UU. jugará su primer Masters la semana que viene, colocó las manos bajas y detrás de la bola en el momento de encarar el golpe para generar efecto.
«Si hay un golpe en el que vas a necesitar las manos atrás para pegarle más alto, como él me dice, es éste», dijo. Su lanzamiento aterrizó suavemente por debajo del hoyo y embocó el putt para salvar el par.
Carla se enfrentó a una situación similar en su segundo golpe en el par 5 del hoyo 13. En lugar de colocarse frente al serpenteante de Rae’s Creek, eligió un híbrido y con un swing duro y rápido superó el agua y alcanzó el green. Hizo dos putts para birdie, y luego sumó otro birdie en el par 5 del hoyo 15, donde golpeó un hierro 7 desde 160 yardas, que se fue largo, recuperando para sellar el birdie.
Carla Bernat se convirtió en la tercera campeona internacional tras la victoria de Lottie Woad el año pasado y la de la japonesa Tsubasa Kajitani, que se impuso en un desempate en 2021 tras un paréntesis de un año durante la pandemia de COVID-19. Su compatriota Hideki Matsuyama ganó el Masters la semana siguiente y atribuyó a Kajitani el mérito de haberle inspirado.
Carla es alumna de Víctor García, padre del campeón del Masters de 2017, Sergio García. Dijo que Victor le envió un mensaje de texto el viernes, animándole a seguir dándose oportunidades para birdies y diciendo que los putts caerían.
Carla, una de las seis españolas que participaron este año, dijo que estaba encantada de ser la primera española en ganar el Augusta National Women’s Amateur.
«Esperemos que no se quede así, porque quiero que lleguen más españoles y que nuestro país siga subiendo y subiendo», dijo. «Sí, ojalá no sea la última».