Joaquin Niemann demostró su clase en las International Series India al hacerse con el liderato de la casa club en la segunda jornada.
Mientras todos a su alrededor se esforzaban por hacer frente a las exigencias del DLF Golf and Country Club, Niemann firmó un recorrido constante, sin bogeys, de cuatro bajo par y 68 golpes, para liderar con seis bajo par y dos golpes de ventaja sobre el estadounidense Ollie Schniederjans y el japonés Kazuki Higa. Ambos hicieron rondas de 69 y 71 golpes, respectivamente, en la apertura de la temporada de las International Series.
El guatemalteco José Toledo firmó la mejor vuelta de la semana, 66 golpes, con nueve birdies, y se sitúa cuarto con tres bajo par, mientras que el estadounidense Bryson DeChambeau hizo 72 y está uno bajo par.
La mitad de los participantes, incluido el líder de la primera ronda, el español Eugenio Chacarra, no pudieron terminar sus rondas, como consecuencia de un retraso de dos horas al comienzo del día debido a la espesa niebla, y del retraso de una hora de ayer por la mañana por el mismo motivo.
El madrileño ha terminado su vuelta esta misma mañana con un 74 lo que le sitúa sexto a cuatro golpes del chileno
Joaquín Niemann, que aspira a dos victorias consecutivas en las Series Internacionales tras ganar el Saudi International en diciembre, hizo un eagle y dos birdies en su primera vuelta sin bogeys en lo que va de semana.
«Es un campo difícil», dijo. «Tienes que acertar tus golpes de salida, tienes que acertar tus líneas. Y, ya sabes, cualquier cosa puede pasar hasta la última caída. Así que sí, quiero decir, estoy contento de estar en esta buena situación de cara al fin de semana. Y queda mucho buen golf por jugar».
Ollie Schniederjans, que juega este año en The International Series gracias a su cuarto puesto en el torneo de LIV Golf Promotions del año pasado, arrasó al final con cuatro birdies.
Se mostró especialmente satisfecho con su birdie en el difícil par cuatro del hoyo 17.
«En el 17, sí, es el hoyo más salvaje que creo que he jugado nunca en un torneo. En el segundo golpe, tienes que juzgarlo a la perfección o puedes liarla parda. Así que, sí, acerté el número justo donde estaba mirando, y saltó esa cresta y acabó a metro y medio de distancia».
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