Mientras el Ripper GC aprovechaba el impulso de la victoria en casa de la semana pasada para lograr su segundo título consecutivo por equipos el domingo en el LIV Golf de Singapur, el capitán del Smash GC, Brooks Koepka, encendía la mecha de una racha que espera que le permita defender con éxito el título en el PGA Championship.
Liderados por el capitán Cameron Smith y el veterano Marc Leishman, los Rippers australianos superaron cualquier preocupación de un efecto de resaca después de su emotiva victoria en Adelaida, disparando una puntuación de recuento de la ronda final de 10 bajo en el Sentosa Golf Club para ganar por tres golpes sobre Fireballs GC y Cleeks GC cuando la temporada 2024 llegó a su ecuador.
«Sabía durante todo el año que en algún momento íbamos a conseguir que la pelota rodara», dijo Smith, cuyo equipo terminó con 32 bajo y se colocó tercero en la clasificación por puntos de la temporada. «Creo que internamente somos el mejor equipo de aquí, y vamos a ser difíciles de batir cuando todos tengamos nuestro mejor juego».
Ciertamente, cuando Koepka está en su mejor momento, es casi imposible batirle. El domingo hizo un 68 (-3) para terminar con 15 bajo par y ganar por dos golpes a Smith y Leishman, convirtiéndose en el primer jugador en la historia del LIV Golf en ganar cuatro títulos individuales. Llegará al PGA Championship en Valhalla dentro de dos semanas con confianza en sus posibilidades de ganar el sexto Major de su carrera. “Estoy aquí, y vamos a ser difíciles de batir cuando todos demos lo mejor de nosotros”.
«Todo está empezando a dar vueltas», dijo Koepka, que se convirtió en el primer jugador activo de LIV Golf en ganar un major con su victoria el año pasado en Oak Hill. «Me gusta cómo están evolucionando las cosas».
Koepka comenzó el día con una ventaja de tres golpes, pero una variedad de retadores cerraron la brecha a lo largo de la ronda. Koepka nunca cedió el liderato, sin embargo, y se recuperó de su único bogey – un tres-putt en el noveno – con un birdie.
Un birdie tardío de Leishman acercó al australiano a un golpe, pero un bogey en su último hoyo dio a Koepka una ventaja de dos golpes en el par 5 del 18, y jugó de forma conservadora para evitar el agua en el hoyo final.
«Sentí el calor, pero fue sobre todo por el calor que hacía», dijo Koepka. «Jugué muy consistente, fallé en los puntos adecuados. Cuando juegas con ventaja, haces eso. No tienes que forzar nada».
Los Rippers GC empezaron el día a un golpe de Smash, pero se pusieron por delante a los 11 hoyos de la ronda, cuando Smith y Leishman se calentaron. El capitán estuvo seis bajo par durante un tramo de 10 hoyos, camino de un 64 (-7), que empató con la ronda más baja del día. Leishman estuvo 5 bajo par durante un tramo de nueve hoyos en el que firmó un 66. Matt Jones hizo un 70 y Lucas Herbert un 74, pero se recuperó después de sufrir un doble bogey en el sexto hoyo.
«Es increíble», dijo Jones. «La semana pasada fue una semana muy especial para nosotros, pero venir aquí esta semana y hacerlo de nuevo, es realmente especial».
El ambiente era ciertamente diferente al de hace una semana, cuando los Rippers tenían a 94.000 australianos pendientes de cada uno de sus golpes. Pero el resultado fue el mismo.
«Sin duda fue un reto», dijo Leishman sobre la lucha contra el efecto resaca. «Puede que haya sido una bendición disfrazada. Sí, estuvimos de fiesta un par de días, pero luego todos tuvimos el martes libre. No sé si muchos de nosotros salimos de nuestras habitaciones de hotel.
«Y creo que conservar la energía esta semana era muy importante, sobre todo al final de la semana, cuando todo el mundo está agotado. Estábamos agotados, pero creo que tomárnoslo con tanta calma al principio de la semana podría habernos ayudado a tener esa pizca de fuerza mental necesaria para cruzar la línea».
Dentro de dos semanas, Koepka intentará sumar dos victorias consecutivas en el PGA Championship. Y el mes que viene, en Houston, los Rippers intentarán sumar tres títulos consecutivos por equipos en la LIV Golf.
«Probablemente sea bueno tener un par de semanas de descanso», dijo Smith. «Hará otro calor en Houston. A todos nos encanta el calor. Creo que todos hemos jugado antes en ese campo de golf. Estamos deseando llegar allí y mantener el impulso».
