J.T. Poston marcó el ritmo en un día idílico en Hilton Head Island con nueve birdies, seis de ellos en un tramo de siete hoyos, para un 63 que le dio una ventaja de dos golpes sobre Collin Morikawa y Seamus Power.
Scottie Scheffler está que echa humo tras su agotadora victoria en el Masters hace sólo cuatro días. Golpeó un “shank” desde un búnker. Casi pierde la cabeza por el barro en su bola de golf. Y aún así logró un 69 (-2) en el RBC Heritage este jueves.
Ludvig Åberg, subcampeón del Masters, estaba en el grupo un golpe por detrás. Rory McIlroy hizo birdies en sus dos últimos hoyos para salvar un día difícil con los hierros y lograr un 67.
Miles de aficionados se alinearon en las calles de Harbour Town para ver a Scheffler, el campeón del Masters que va a por su cuarta victoria en sus últimos cinco torneos. Hubo momentos en los que Scheffler no parecía el jugador número 1 del mundo, y se imaginaba que así sería con muy poco tiempo para prepararse.
«Por eso traté de darme un poco más de gracia en el campo hoy, porque sí, emocionalmente estoy un poco agotado. Mentalmente, un poco agotado», dijo.
«Siento que tengo más energía ahora que al principio del día, al levantarme para ir a jugar al golf», dijo. «Creo que entrar en el torneo, pegar algunos golpes, frustrarme un poco, emocionarme un poco al terminar, todo son buenas emociones. Es agradable volver al modo torneo».
Todos los jugadores menos 16 de los 69 participantes estuvieron en el Masters, al menos durante parte de la semana. J.T. Poston cerró con un 70 en el Augusta National y llegó a Hilton Head Island con un poco de emoción lejos del golf. Es la primera vez que viaja con su hija de un mes, Katherine Scott.
La llaman Scottie, un apellido de ambos lados de la familia.
«Es un buen momento para llamarse Scottie», dijo Poston con una sonrisa.
Poston embocó un chip desde veinte metros en el hoyo 4, par 3, para iniciar una racha extraordinaria. Le siguieron tres birdies consecutivos desde una distancia de tres metros, un putt para birdie de cuatro metros y medio en el corto hoyo 9, par 4, y otro birdie desde tres metros para empezar los últimos nueve hoyos.
Para Collin Morikawa, fue la confirmación de que está en el buen camino. El ganador de dos majors estaba entre los que compartían el liderato el domingo en el Masters hasta que cometió un par de dobles bogeys en la vuelta. Terminó en un empate por el tercer puesto.
«Muchos de los pensamientos de swing que he tenido han funcionado durante un día o dos y luego se han ido», dijo Morikawa. «Pero mira, duró todo el camino hasta el Masters. Ha durado hasta aquí. Lo que estoy haciendo funciona. Sólo tengo que ceñirme a eso y entender por qué está funcionando y simplemente salir ahí fuera y jugar al golf.»
Scottie Scheffler y Jordan Spieth estaban en el grupo detrás de Poston recibiendo toda la atención, Scheffler como el jugador dominante en el golf, Spieth porque su nivel de entretenimiento es alto. Los aficionados probablemente no esperaban un shank, y Scheffler tampoco.
