Erik van Rooyen hizo dos eagles el jueves en su camino a un ocho bajo, 63 golpes, para un golpe de ventaja en el Abierto de México en Vidanta, un fuerte comienzo en su intento por ganar un segundo título de la PGA Tour en México en los últimos cuatro meses.
Van Rooyen pegó un hierro 3 a dos metros para eagle en el par-5 del hoyo 6 en Vidanta Vallarta, y luego embocó en el par-5 del hoyo 12 para un segundo eagle. Su único error fue un bogey cuando un chip directo pasó a metro y medio del hoyo en el 15 y falló el putt de par.
Sami Valimaki de Finlandia, uno de los 10 jugadores del DP World Tour que obtuvieron tarjetas del PGA Tour este año, firmó 64 golpes
Cristóbal Del Solar, de Chile, que estableció el récord del Korn Ferry Tour hace dos semanas con un 57 en el Campeonato de Bogotá, firmó en 65 golpes.
Van Rooyen se crió en Sudáfrica, jugó golf universitario en Minnesota y no puede explicar por qué tiene tan buena sensación para el golf en México.
«Si pienso en Chapultepec hace unos años, el WGC que tuvimos allí era de hierba Kikuyu, greens de Bentgrass, en eso crecí. Aquí es un poco diferente», dijo van Rooyen. «No sé lo que es, tiene que ser la comida, la gente, todo el tinglado».
A Del Solar le acompañaban con 65 David Lipsky, el noruego Henrik Norlander y el sudafricano MJ Daffue. El danés Thorbjørn Olesen, que el miércoles recibió una invitación especial para jugar en el Masters, estaba en el grupo con 66.
Jorge Campillo firmó un magnifico comienzo en su aventura con tarjeta del PGA Tour, entregó una tarjeta de 66 golpes que le sitúa en el décimo quinto puesto.
